Buenos días a todos. Quería aclarar algo sobre el debate del rearme en Europa, impulsado por la incertidumbre sobre el apoyo de Estados Unidos. Esto implica destinar más presupuesto nacional a defensa, lo que inevitablemente restará recursos a programas sociales para los más necesitados. Esto me lleva a una pregunta fundamental: ¿cuál es el origen y la psicología de la violencia? Tras reflexionar mucho, he llegado a la conclusión de que los seres humanos no nacemos violentos. Un niño al nacer busca el vínculo, la conexión afectiva para ser feliz. Esta búsqueda de afecto y ternura es primordial, especialmente en el primer año de vida, crucial para el desarrollo de la personalidad. Entonces, ¿por qué tanta violencia en el mundo si esta es nuestra tendencia natural? Porque el ser humano se construye, al igual que un edificio necesita un buen proyecto, materiales y constructores. Nacemos con una predisposición hacia la salud mental, el amor y la colaboración, pero si el entorno falla – padres sin recursos emocionales, falta de cultura, experiencias negativas – el "edificio humano" no se construye bien. Una sociedad que prioriza el dinero y el poder por encima de todo, generando desigualdades extremas, donde algunos niños tienen todo y otros nada, donde hay hambre y guerra, ¿qué futuro pueden construir esos niños? ¿Qué personalidad desarrollarán los niños de Palestina o Ucrania? La violencia nace cuando ese edificio humano no se construye correctamente, creando seres frustrados y desorientados. Los psicólogos debemos salir de nuestros despachos y llevar la psicología a la calle, a la economía, a la política. Debemos luchar por la salud mental del mundo, estar presentes en todos los ámbitos para señalar el camino hacia una sociedad sin violencia, sin psiques enfermas que la produzcan. Así se crean las guerras. Ante una ofensa, la reacción suele ser la violencia, la venganza. Pero para buscar la paz, necesitamos ser personas que estén por encima de la venganza, capaces de pensar en soluciones constructivas. Lo mismo ocurre entre naciones: la escalada de represalias solo perpetúa la violencia. Quieren rearmar Europa, pero ya vivimos en un sistema neoliberal violento, en una cultura que fomenta el poder, el dinero y la competencia desmedida. Incluso nuestra democracia, aunque lo mejor que hemos creado hasta ahora, necesita evolucionar hacia formas más participativas y centradas en las personas. Sin embargo, no olvidemos que a lo largo de la historia ha habido innumerables personas – Sócrates, Jesús de Nazaret, Gandhi, Luther King, Navalni, y muchos anónimos – que han dado su vida por un mundo sin violencia. Sócrates prefirió la muerte a renunciar a sus ideas. Jesús de Nazaret nos legó un mensaje de cambio radical basado en el amor y la verdad. Gandhi y Luther King movilizaron multitudes con la no violencia activa. Navalni sacrificó su vida por defender los valores de la libertad en Rusia. Sí, existen modelos que no son la violencia ni el rearme, sino la inteligencia y el talento para construir un mundo mejor. En nuestras vidas, ante una ofensa, siempre creemos que la única respuesta es la represalia. Pero las personas inteligentes buscan otras soluciones, basadas en la verdad, la autenticidad, la sinceridad y la colaboración. Un mundo bueno.