Revistas del corazón 5z1gz

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Silencio. Se habla. Una hora semanal dedicada al espectáculo y dirigida por nuestros cómicos y autores a la imaginación de los oyentes.

A partir de este momento. Revistas del corazón de Juan José Alonso Millán es la obra en dos actos y un prólogo que les invitamos a escuchar seguidamente.

Llegará a ustedes en una adaptación radiofónica de Pablo Jiménez para Radio Nacional de España, Radio 1. Buenas noches señoras y señores. Por fin vamos a saber quién es la ganadora este año del título Dama de España, premio que otorga anualmente la revista Aristocracia, que cumple hoy su primer cuarto de siglo de existencia. Decana de la prensa del corazón ha alcanzado en los dos últimos años una tirada de 500.000 ejemplares.

Aristocracia se siente muy orgullosa de pertenecer a esa legión de publicaciones modélicas. Hola, Semana, La Revista, Lecturas, Diez Minutos, etcétera, que contribuyen a la difusión de la cultura de nuestro país. Pero, atención, Pitita Ridruejo nos hace señas. Eso quiere decir que ya tenemos Dama de España. Gracias. Aquí está el sobre con la decisión del jurado. Señoras y señores, la ganadora es Elvira Manrique, duquesa de Las Altas Torres. Ante ustedes, la Dama de España 1989.

Muchas gracias, queridos amigos. ¡Qué noche tan fabulosa! Estoy súper encantada.

¿Emocionada, duquesa? ¿Cómo no voy a estarlo? ¿Sorprendida por esta distinción del jurado? La verdad, yo confiaba en la imparcialidad del jurado. Además, supongo que la votación no debe haber sido muy difícil, porque la verdad es que todas las candidatas a este premio tienen tanta clase, estilo, cultura, elegancia y distinción como yo. Pero más no, ¿eh? ¿Para qué nos vamos a engañar? Así es que muchas gracias a este maravilloso jurado que ha tenido el acierto y el buen gusto de elegirme.

Estas han sido las breves y acertadas palabras de la nueva Dama de España. Cultura, sensibilidad y, sobre todo, señorío para poder ser rica, elegante, aristócrata y, a la vez, conectar con el pueblo en su raigambre más popular. Así es, Elvira Manrique, duquesa de las Altas Torres. ¡Uy, qué barbaridad! ¡Qué día de teléfono y de telegramas! ¡Dios mío, qué barbaridad! Bueno, cógese al teléfono o no. Esa debe ser la periodista que tenía citada.

Yo abriré. Domicilio de la señora duquesa de las Altas Torres. Con la fiel Antonia. El gusto es mío. Sí, Dama de España, sí señor.

No, que yo sepa la señora duquesa no pienso abrir ningún restaurante en Marbella.