Danza de Dragones 5a375m

El Regente Kevan Lannister preside una reunión del Consejo Privado. Ni la reina Cersei ni la reina Margaery están presentes, y tampoco el rey Tommen, pues Kevan pensó que sería mejor que el joven rey pasara la mayor cantidad de tiempo posible junto a su madre antes del juicio y posible ejecución de ésta. El Caballero de Nido del Grifo, Ronnet Connington, se encuentra ante el Consejo, insistiendo en que es leal al rey Tommen y en que no tiene participación en la reclamación de quien se hace pasar por Jon Connington ni con el pretendiente Targaryen que se supone trae con él y que lidera la Compañía Dorada. Ronnet suplica que le dejen probar su lealtad en la batalla, pero la nueva Mano del Rey Mace Tyrell rehúsa y ordena a Ronnet que se mantenga en la Fortaleza Roja. Kevan comienza a resentir las demandas de los Tyrell, tal y como su sobrina se quejaba, pero sabe que no puede oponerse a ellos abiertamente; los Tyrell y Randyll Tarly tienen a sus ejércitos a las afueras de Desembarco del Rey, mientras que el ejército Lannister aún se encuentra en las Tierras de los Ríos. Mace Tyrell desecha la idea de que Jon Connington siga vivo, pero Kevan no está tan seguro y cree que la edad habría hecho a Connignton más sabio, más cauto y más peligroso. El Consejo acuerda que la amenaza de Connington debe ser aplastada antes de que dé aviso a Daenerys Targaryen y esta se una a ellos. El Gran Maestre Pycelle sugiere comprar a la Compañía Dorada, pero el Consejero de la Moneda, Harys Swyft, desecha la idea: las arcas reales están casi vacías, el Banco de Hierro de Braavos está pidiendo el pago de la deuda y nuevos préstamos desde Myr son imposibles. Kevan sugiere probar con los magísteres de Pentos o ir a Braavos en persona para negociar una prórroga. A continuación se discuten los juicios; Kevan anuncia que su sobrina ha elegido un juicio por combate, con Ser Robert Strong como campeón. Tanto Mace Tyrell como Randyll Tarly expresan sus dudas sobre el hombre, que Kevan comparte, pues todos han oído los rumores: Meryn Trant afirma que nunca ha visto a Ser Robert comer o beber, mientras que Boros Blount dice que no lo ha visto ir al baño. A pesar de las dudas, Kevan anuncia que si Cersei es declarada inocente será enviada de inmediato a Roca Casterly y que no tomará parte en la educación de Tommen.

Daenerys Targaryen camina por el Mar Dothraki hacia el sur. Intenta volver a Meereen siguiendo un pequeño arroyo que piensa desembocará en el Skahazadhan en algún momento. Había volado a lomos de Drogon, pero no pudo hacer que volviera a la ciudad. En vez de ello, la había llevado a su madriguera, una pequeña cueva en una colina que Daenerys llamó Rocadragón en referencia al lugar donde nació. Daenerys se enferma en el camino y alucina mientras está tendida en el pasto, sangrando. Poco después, un explorador dothraki se acerca a ella, pero no la ve. El explorador se congela al ver acercarse a Drogón y huye. Daenerys llama al dragón mientras está cerca y lo monta. Drogón caza, devora un caballo y una hambrienta Daenerys se une a él, comiendo del animal. En ese momento, Khal Jhaqo, antiguo jinete de sangre de Khal Drogo, y su khalasar de más de cincuenta guerreros la encuentran.

El príncipe Quentyn Martell muere de las graves quemaduras. Ser Barristan Selmy es ahora Mano de la Reina Daenerys Targaryen y, como tal, encabeza el Consejo que gobierna Meereen. Ser Barristan envía a la Gracia Verde, Galazza Galare, a tratar con los yunkíos y lograr la liberación de sus rehenes. No espera que esto suceda, por lo que prepara una estrategia por si fallan las negociaciones, esperando el ataque de los yunkíos. Envía a los dornienses, Archibald Yronwood y Gerris Drinkwater, junto a los demás cautivos de los Hijos del Viento de vuelta con el Príncipe Desharrapado y su compañía, esperando que puedan convencerlo de liberar y proteger a los rehenes durante el ataque.

Jon Nieve se propone llevar a cabo una misión de rescate a Casa Austera para salvar a los salvajes sobrevivientes de la Batalla del Castillo Negro y los hermanos de la Guardia de la Noche que se encuentran atrapados allí. Madre Topo y su gente ya habían llegado al extremo de comerse a los muertos. La Reina Selyse y la princesa Shireen, rodeadas de sus escudos juramentados desde que hay salvajes en el Castillo Negro, intentan desalentarlo y hacer que abandone a estas desafortunadas personas a su suerte, pero Jon sigue determinado. Ser Axell Florent le anuncia a Gerric Sangrerreal de la casa Barbarroja, Rey de los Salvajes, el cual ha accedido a conceder la mano de sus tres hijas a tres caballeros de la Reina. Jon sabe que para el Pueblo Libre la descendencia de Gerrick no tiene ningún valor, pero no lo dice y les desea felicidad con sus nuevas esposas. Al salir, Melisandre se le aproxima y le dice que ha perdido todos los barcos en Casa Austera, no regresará ningún hombre, que lo ha visto en sus fuegos. Jon le responde que se ha equivocado en sus profecías: sobre una muchacha vestida de gris, a lomos de un caballo moribundo; sobre puñales en la oscuridad y sobre un príncipe prometido, nacido de humo y sal. Jon le hace varias preguntas respecto a Stannis Baratheon, Mance Rayder con las mujeres de las lanzas y su hermana Arya Stark. Melisandre le dice que mire al cielo, y cuando tenga sus respuestas, vaya a buscarla. Le advierte que el invierno está casi encima y que es su única esperanza.

El príncipe Quentyn Martell lidera un plan para robar los dragones de la reina Daenerys Targaryen. Con la ayuda de la compañía mercenaria Hijos del Viento, llegan a la bóveda donde Rhaegal y Viserion están encerrados. Allí, sin embargo, utilizan la contraseña "perro" con las Bestias de Bronce, contraseña que era parte del plan para derrocar al rey Hizdahr zo Loraq esa misma noche. Las Bestias de Bronce se dan cuenta que son embusteros y se desata la batalla; cuatro guardias mueren y el príncipe Quentyn casi es alcanzado por una lanza.

Ser Barristan Selmy se encuentra con Skahaz mo Kandaq de nuevo para seguir adelante con su plan de derrocar a Hizdahr zo Loraq y tomar la ciudad, que sería gobernada por un Consejo hasta el regreso de Daenerys. Deciden que la palabra clave para su plan será "Groleo", en referencia al rehén que fue asesinado por los yunkíos. Durante el resto del día, Ser Barristan se dedica a hacer sus rondas por la pirámide y a entrenar a sus muchachos. Piensa que algunos de ellos estarán listos para ser caballeros pronto. Sin embargo, al pensar en lo que haría esa noche, decide que sería malo para ellos ser nombrados caballeros por un caballero sin honor. Sermonea a los muchachos sobre el honor y piensa que tal vez, algún día, lo entenderán.

Tyrion ha llegado a un acuerdo con Ben Plumm para unirse a los Segundos Hijos, entre los cuales se destaca una cuantiosa suma de dragones de oro, las tierras y el señorío de Roca Casterly, siendo la firma final con sangre. Después de esto, se le dijo que fuera a encontrar una armadura para él y para Penny. Regresa a donde ella está durmiendo, siguiendo angustiada por el abandono del cerdo y el perro que eran parte de su show. Tyrion le dice que los dos animales han sido sacrificados casi definitivamente por los hombres de Yezzan zo Qaggaz. Mientras que están en busca de armas, encuentran a Jorah vestido con una mezcla aleatoria de armadura, que según él es de una calidad decente. Tyrion abofetea a Penny, tratando de obligarla a darse cuenta de que tienen que llevar una armadura o morir probablemente. Por último, Tyrion dice que él se encargará de asegurar que los Segundos Hijos se cambien de bando, ya que tanto Tyrion como Jorah coinciden en que están en el bando perdedor de la batalla que se avecinaba.

Cersei se ve obligada a caminar desnuda desde el Gran Septo de Baelor a la Fortaleza Roja como expiación por sus pecados confesados, siendo la única manera de escapar del septo. Su tío Kevan Lannister no se opondrá a la Fe, y Cersei no tiene suficientes amigos en el Septo para arriesgarse a un juicio como Margaery Tyrell, por lo que su única esperanza es un juicio por combate. Cersei siente miedo ante la idea de ser paseada por las calles desnuda, recordando la violencia del pueblo llano causado durante la Revuelta de Desembarco del Rey, pero se tranquiliza pensando que no le pasará nada.

Luego de la reunión de once Hombres sin Rostro, Arya está lista para su primer asesinato. El Hombre Bondadoso le infoma que necesitará un nuevo rostro para este trabajo, debido a que Gata de los Canales es demasiado reconocible. Él y la Niña Abandonada la guían a un subterráneo prohibido de la Casa de Blanco y Negro: las paredes están cubiertas de rostros y Arya se da cuenta de que son las caras de las personas que mueren en el templo. La cara elegida para Arya es la de una niña joven que fue abusada al punto de dejarla permanentemente desfigurada y que llegó al templo buscando la muerte. La sangre de Arya es usada para suavizar el rostro, que parece más cuero que piel, en el tejido de su cara, el que finalmente se une a su cabeza y se convierte en su nueva cara. El Hombre Bondadoso le advierte que sufrirá pesadillas de la niña cuyo rostro ha tomado, pero sólo por un tiempo. La advertencia prueba ser verdadera y esa noche Arya sueña con los abusos a los que la niña era sometida por su padre. Al día siguiente, se le señala a Arya su primer objetivo: un anciano asegurador que trabaja en los muelles.

Victarion Greyjoy y la Flota de Hierro continúan su travesía hacia Meereen. A pesar de que la tripulación de la Victoria de Hierro no aprueba la presencia de Morroqo, Victarion insiste en que el Dios Rojo les ayudará en el viaje. Menciona que a pesar de que su mano y brazo están quemados, son más fuertes que nunca. Declara que "dos dioses son mejores que uno. Ningún enemigo es rival para dos dioses." La Flota de Hierro captura varias naves mercantes, muchas de las cuales fueron vaticinadas por Morroqo. Como muestra de aprecio, Victarion elige a las siete esclavas de cama lysenas más hermosas de entre los esclavos de las naves capturadas y las baja en un bote al mar. Las hace quemar como tributo tanto al Dios Ahogado como a R'hllor. Luego del sacrificio, vientos favorables llenan las velas de la Flota de Hierro, que ahora cuenta con 60 naves. Esa noche, Victarion le permite a Morroqo inspeccionar el Cuerno Dragón que le entregara su hermano Euron. Morroqo lee los glifos valyrios tallados en el cuerno, diciendo que el nombre del cuerno es "Yo soy Atadragones" y que los glifos incluyen una advertencia: "Ningún mortal me hará sonar y seguirá con vida. Sangre por fuego, fuego por sangre". Morroqo le dice a Victarion que debe reclamar el cuerno y hacerlo suyo, con sangre.

Asha Greyjoy sigue siendo prisionera de Stannis Baratheon y custodiada por Alysane Mormont. Las nieves los han mantenido atrapados durante diecinueve días, a una distancia de cien leguas de Invernalia, una distancia que con el clima propicio podrían cubrir en tres días. La alimentación se ha convertido en una preocupación importante. La oferta de pescado del lago ha disminuido, y ya han estado confiando en sus caballos moribundos como fuente de alimento. Algunos hombres incluso han comenzado a recurrir al canibalismo: cuatro hombres de Casa Peasebury fueron capturados y ajusticiados por comer partes de un hombre muerto de la Casa Fell.

Jon Connington y la Compañía Dorada han desembarcado en Poniente por el Cabo de la Ira, y logran apoderarse de Nido del Grifo y otros pequeños castillos tomándolos por sorpresa. Tras la captura de Nido del Grifo, Connington ordena a Haldon enviar un mensaje al príncipe Doran Martell para informarle que su sobrino Aegon está vivo, a fin de obtener la alianza con Dorne. Jon sabe que no podría haber esperado lealtad alguna de estos hombres si hubiera reclamado su hogar mientras Robert y Renly Baratheon continuasen dominando las Tierras de la Tormenta. También recuerda el momento en que el príncipe Rhaegar Targaryen visitó el castillo; ahora se encuentra en el mismo lugar para colocar a Aegon en el Trono de Hierro, con lo que podría enmendar su fracaso en Septo de Piedra. En sus habitaciones, Jon en privado trata su psoriagrís con vino. Teme que si saliera a la luz que padece esta enfermedad los señores todavía leales a la Casa Connington le abandonarían.

Con Daenerys desaparecida, los compañeros del príncipe Quentyn Martell lo urgen para que tome en cuenta las advertencias de Ser Barristan Selmy y regresen a Dorne. Preocupado por perder el respeto de su padre y su hermana si regresa sin Daenerys, Quentyn decide quedarse en Essos hasta encontrarla. Los tres dornienses se encuentran con el Príncipe Desharrapado dentro de Meereen, en el Loto Violeta. Tienen la intención de contratar a la compañía mercenaria Hijos del Viento, pero el Príncipe aun resiente su traición. Quentyn promete el doble de lo que los yunkíos le están pagando una vez que lleguen a Dorne, pero el Príncipe Desharrapado se muestra inamovible. Quentyn le revela que tiene un plan para robar uno de los dragones de Daenerys que quedan en Meereen; el Príncipe Desharrapado lo piensa y declara que Pentos es el precio que Dorne debe pagar por su alianza.

Ser Barristan Selmy está presente en la corte de Hizdahr zo Loraq, que está inquieta ante la ausencia de Daenerys Targaryen. Las Bestias de Bronce tienen un nuevo jefe, el primo del rey, Marghaz zo Loraq. El senescal de Daenerys, Reznak mo Reznak mantiene una voz fuerte en la corte, aconsejando al nuevo rey. Harghaz es ahora aclamado como un héroe después de su lucha contra Drogon. Ser Barristan nota la presencia del príncipe Quentyn Martell y sus dos compañeros dornienses en la corte, recordando a su antiguo compañero de la Guardia Real, el príncipe Lewyn Martell, tío abuelo de Quentyn. Considera la posibilidad de que las langostas envenenadas que Belwas comió pudieran haber estado destinadas a Hizdhar como parte de un complot para que Daenerys tuviera que casarse con Quentyn, dado que uno de los tíos del príncipe era conocido por envenenar a los que se interpusieran en su camino.

Jon Nieve tiene un sueño en el que lucha en el Muro contra hombres muertos, con una espada de fuego. Cuando despierta, se reúne con sus oficiales, ya que ese día más de tres mil salvajes al mando de Tormund Matagigantes cruzarían el Muro. Ya se había negociado el precio de entrada entre Jon y Tormund. Los salvajes darían todos sus objetos de valor, los que se venderían para comprar alimentos, y se entregarían un centenar de hijos de líderes salvajes como rehenes. Jon pasa al otro lado acompañado por una pequeña guardia y allí se encuentra con Tormund. Tras esto, los salvajes empiezan a pasar al otro lado. Primero pasan los rehenes, cien niños salvajes de entre ocho y dieciséis años, para evitar futuras rebeliones por parte de sus padres. Inicialmente, dos chicas están incluidas en el centenar de rehenes, las cuales deben ser reemplazadas por dos nuevos niños. Tormund incluye voluntariamente a su propio hijo entre los rehenes como un signo de buena fe. Jon decide tomarlo como su propio escudero. A continuación pasan los guerreros, alrededor de un millar, que van dejando sus joyas en carros de la Guardia.

en: Capítulos de Danza de Dragones Danza de Dragones-Capítulo 57 VER CÓDIGO Tyrion XI Capítulo de Danza de Dragones Personaje PdV Tyrion Lannister Actual Tyrion XI Anterior PdV Tyrion X Siguiente PdV Tyrion XII Anterior El Aspirante del Hierro Siguiente Jon XII Sumario 1 Sinopsis 2 Personajes 2.1 Aparecen 2.2 Mencionados 3 Otros idiomas Who Would Win, Batman Or Bugs Bunny? MultiVersus uncovered - The Loop 00:06 02:49 Sinopsis Yezzan zo Qaggaz está muriendo de yegua pálida. Un curandero explica que la única ayuda para Yezzan es darle agua pura y limpia. Tyrion pide a Cicatriz, un esclavo-soldado al servicio de Yezzan, enviar dos hombres para conseguir el agua limpia y fresca para Yezzan. Cicatriz se niega porque no quiere recibir órdenes de un esclavo, a pesar de que él mismo es un esclavo. Le dice a Tyrion que vaya a obtener él mismo agua con Penny. Tyrion pide la mula y el carro para sacar el agua. Cicatriz se niega pero luego manda a Jorah Mormont que les ayude a conseguir el agua. Los tres viajan a través del campo, desviándose ligeramente del camino. Durante la travesía, Tyrion ve que se están construyendo defensas para un posible retorno de Drogon por la zona, aunque sabe que la mayoría de tales defensas resultarán inútiles contra los dragones. De hecho, los dragones no son vulnerables ni en el vientre ni en sus gargantas, sólo sus ojos. Mientras tanto, aguarda cerca del pozo, donde escucha las últimas noticias y rumores de los otros esclavos, que están discutiendo sobre lo ocurrido en la fosa de Daznak. Se discute si Daenerys Targaryen voló sobre el dragón o si murió en el intento de huir. Tyrion cree que no ha muerto porque su cuerpo supuestamente sin vida no ha sido encontrado. Después de conseguir el agua y regresar, Tyrion llega al campamento de los Segundos Hijos. Él sabe que ahora mismo, mientras Yezzan está al borde de la muerte, es el mejor momento para tratar de escapar de las garras de los traficantes de esclavos. Cuando llegan allí, Tyrion es reconocido como el enano que Ben Plumm quiso comprar. Allí se revela que él sabe que Ben Plumm conoce quién es realmente Tyrion, y que el propio Tyrion sabe que Plumm es un hombre originario de las Tierras del Oeste, al igual que toda la Casa Plumm y que los dragones parecían calmarse ante él. Da a entender que sabe más sobre el linaje de los Plumm, creyendo que puede que haya algo más que una gota de sangre Targaryen en su interior. Ben Plumm reconoce entonces a Jorah Mormont, y Tyrion convence a Ben Plumm de dejarlos unirse a los Segundos Hijos en vez de matarlo con el fin de ganar un señorío por parte de Cersei. Tyrion invita a Plumm a una partida de Sitrang mientras continúan charlando.

Victarion Greyjoy y la Flota de Hierro están anclados cerca de la Isla de los Cedros, justo a la entrada de la Bahía de los Esclavos, para encontrar a Daenerys Targaryen. Victarion fue enviado por su hermano el rey Euron Greyjoy al mando de la Flota de Hierro para que regresase con Dany, pero Victarion decide tomarla como esposa para sí mismo. La mano izquierda de Victarion fue herida luchando contra Talbert Serry en la Batalla de las Islas Escudo y esta se infectó. El Maestre Kerwin ha tenido poco éxito en el tratamiento de la herida. Victarion se enteró de que la flota de Volantis esta de camino hacia Meereen, mientras que su propia flota se dispersó en su camino y sólo la mitad ha llegado a reunirse de nuevo. La ultima nave en llegar, la Dolor, lleva abordo al sacerdote rojo Morroqo, que cayo por la borda de la Selaesori Qhoran en su viaje a Mereen. Afirma haber visto en las llamas que Victarion moriría a menos que él le ayudase. Morroqo logra curarlo, Victarion sacrifica al maestre y sigue con su viaje a Mereen.

Daenerys Targaryen no ha regresado y muchos temen que haya muerto. Los Dothraki de su khalasar la buscan al otro lado del río Gusano. Belwas el Fuerte todavía está en peligro de muerte por las langostas envenenadas que comió durante la reapertura de las arenas de combate y Ser Barristan Selmy no se fía de las Gracias azules que están cuidando de él. Jhogo, Daario Naharis, el almirante Groleo y Héroe de los Inmaculados siguen siendo prisioneros de los yunkíos. El senescal de Hizdahr zo Loraq, Reznak mo Reznak, le dice a Ser Barristan que Hizdahr desea recibir a sus invitados yunkíos sin Barristan ahí, esencialmente quitándole sus deberes como parte de la Guardia de la Reina. De todos los siervos de Dany, sólo Missandei mantiene su puesto dentro de los los apartamentos reales, a pesar de que ella también ha sido trasladada a otro lugar. Los Inmaculados han sido menospreciados por Hizdahr y los Afeitados bien podrían ser más leales a Skahaz mo Kandaq que a Hizdahr, por lo que el rey se hace acompañar y guardar por los peleadores de las arenas de combate mientras se prepara para las conversaciones de paz con los yunkíos.

Cersei sigue siendo prisionera de la Fe. Se pregunta contínuamente si Jaime va a venir a por ella, además de preguntarse qué ha pasado con Loras Tyrell tras el Asedio de Rocadragón. La última visita que recibió fue la de Qyburn. Se siente impotente, y reza sin cesar a los Siete Dioses, ya que eso es lo que quieren, pero no recibe ayuda alguna. Al principio, se enfrentaba a los carceleros, pero son mucho más fuertes de lo que pensaba. Agotada, acaba asumiendo que ha de confesar. Pide ser llevada ante el Septón Supremo, donde ite las relaciones extramaritales que tuvo. En todo momento insiste en que hizo estas cosas porque tenía miedo por sus hijos, y éstos eran su único medio de asegurar la confianza de esos hombres. El Gorrión Supremo sigue acusándola de traición al reino, de incesto, de regicidio y deicidio, todos los delitos que Osney Kettleblack reveló sobre Cersei tras su tortura. Se las arregla parcialmente diciendo que son mentiras que Stannis Baratheon ha hecho con el fin de obtener el Trono de Hierro, explicación que satisface al Septón, ya que la fe está dispuesta a condenar la "adoración de un demonio rojo". Para obtener la verdad, sin embargo, el Septón Supremo insiste en que Cersei sea juzgada por la Fe o por juicio por combate, con lo que estaría representada por un caballero de la Guardia Real, en su condición de Reina, en el mismo caso que Margaery Tyrell. Ella se permite la visita de su tío Kevan, quien, aunque enojado con ella por corromper a Lancel, responde a sus preguntas. Él le dice que Jaime se encontraba en Árbol de los Cuervos, para marchar después con una mujer desconocida. Concluyen en que no tienen la fuerza ni influencia suficiente para salir airosos. Lord Mace Tyrell, sin embargo, no está dispuesto a meterse en asuntos del reino hasta que se resuelva el asunto con su hija Margaery. Mace es ahora la Mano del Rey, Paxter Redwyne es Gran Almirante, y Randyll Tarly ha sido designado Justicia Mayor. Los señores del Dominio son ahora quienes representan estos importantes cargos. No obstante, Kevan trae peores noticias para Cersei. De acuerdo a Ser Balon Swann, Arys Oakheart ha muerto, y Myrcella ha perdido una oreja. Aunque Cersei insiste en que la mutilación de Myrcella ha sido obra de Tyrion, ve una oportunidad en la vacante abierta de la Guardia Real, y le pide a Kevan hacer llamar a Qyburn para un reemplazo.

Jon Nieve negocia con Tormund Matagigantes un acuerdo entre la Guardia de la Noche y el Pueblo Libre. Al finalizar ambos quedan insatisfechos, lo cual para Jon significaría un negocio justo: los hermanos de la Guardia permitirán pasar al sur del Muro cuatro mil salvajes, incluyendo ochenta mamuts y doscientos gigantes para guarnecer los castillos abandonados y así defender todo el Muro. Los mamuts deben atravesar por Guardiaoriente del Mar, mientras que al resto se les permitirá pasar por las puertas del Castillo Negro. A cambio, los salvajes deben dejar primero como rehenes en el Castillo Negro un centenar de hijos de sus líderes y entregar al cruzar todos los objetos de valor que posean para pagar los alimentos. Mientras se encaminaban hacia el Muro, Val le pregunta por el pequeño monstruo, el cual está el doble de grande y el triple de gritón. Cabalgan juntos y Jon le dice que le ha acondicionado los pisos superiores de la Torre de Hardin, donde tendrá más espacio que en la Torre del Rey. Además, son sus hombres los que vigilan la Torre de Hardin, no los hombres de la Reina, y Wun Wun duerme en la entrada. Val queda sorprendida y le dice que ni siquiera Dalla recibía semejante honor de tener un gigante como protector. Val acompaña a Jon para ver a la Reina Selyse y contarle del trato. La reina se emociona y le dice que su marido se sentirá orgulloso, pero que primero todos los salvajes tiene que jurar lealtad al rey y convertirse a la fe de R'hllor. Jon les dice que no era parte de las condiciones acordadas y Val agrega que el Pueblo Libre no se arrodilla. Selyse se pone bastante molesta por su comentario y agrega que tendrán que buscarle un esposo que le enseñe modales. Val no se arrodilla antes de retirarse, como si lo hace Jon. Val se da cuenta de las desfiguraciones faciales de Shireen Baratheon, señalando que es la muerte gris. Jon le dice que no siempre es fatal, pero ella está convencida de que es la muerte y que el Monstruo y las nodrizas deben estar fuera de esa torre y cerca de ella. Jon se lo debe por haberle traído a Tormund.