Capítulo 62: El Sacrificio 2s202g

El sacrificio los hombres de la reina levantaron la pira en el prado de la aldea a decir verdad era más bien el izquierdo de la aldea la nieve llegaba por la rodilla en todos los lugares que no habían despejado a golpe de pala y pico para acabar hoyos en el terreno y lado desde el oeste soplaba en remolinos de viento que lanzaban aún más nieve sobre la lagos congelados no tiene por mirar dijo al y mormona lo prefiero bello y era la hija del kraken no una niña consentir a que nos soportar las cosas desagradables había sido un día oscuro frío un día de hambre igual que la anterior y los anteriores habían pasado casi todo el tiempo en el hielo tiritando junto a un par de agujeros que habían abierto en la superficie del lago menor tratando de sujetar el sedal con las manos entorpecidas por las más rock las jornadas atrás todavía podían atrapar uno o dos veces por cabeza y los hombres el bosque de los lobos más expertos en pescar en el cielo conseguían hasta cuatro o cinco lo único que había logrado pescar allá en toda la jornada era un frío que la lo hasta los huesos y al y no había tenido mejor suerte llevaban tres días sin capturaron pez pues a mi no me hace ninguna falta verlo insistió la osa no es a que pretenden quemar los hombres en la reina vaya se les doy mi palabra de que no es que aparece a dónde iba a ir hago interfaz a soltó una carcajada tengo entendido que sólo tres días a caballo seis hombres de la reina se afana van en introducir dos enormes postes de madera de pino y los hoyos que otros seis habían acabado haya no tuvo que preguntarles para que ya lo sabía estacas pronto sería completamente de noche y había que alimentar al dios rojo una ofrenda de sangre y fuego así le llamaban los hombres en la reina para que el señor de luz vuelva hacia nosotros su ardiente mirada y nos libre de esta nieve tres meses maldita incluso en este lugar de miedo y oscuridad el señor de luz nos protege ceremonia base rico de ifá riña los hombres congregados para contemplar como clavaba en las estacas a martillazos que tiene que ver surgió sureño con la mi bebe quiso saber hartos flynn cuya barba negra era una costo de hielo la ira de los antiguos dioses la que cae sobre nosotros a ellos deberíamos apaciguar dijo google como grande rol el rojo no figura para nada que lo único que conseguirán será enfadar a los antiguos dioses que observan desde su isla la aldea de campesinos se encontraba entre dos lagos y el mayor de ellos estaba salpicado de pequeñas islas boscosas que sumaban en el hielo como los puños cerrados de un gigante ahogado en una de ellas se alzaba un anciano viejo y retorcido con el tronco y las ramas tan blancos como la nieve que lo rodeaba ocho días atrás se ve hacer cabo con ánimo hormonas para ver mejor los ojos rojos sentidos y la boca ensangrentada no es más que sabía se había dicho las sabias roja que fluye por los ancianos pero sus ojos no acababan de convencerse había que ver para creer y lo que veía era sangre congelada ustedes los norteño son los que provocaron estas nieves replicó luis m ustedes y sus árboles demoníaco su rol horno salvará rol hornos condenará insistió hartos link mal rollo parta todos sus dioses pensó a creyó y ser godoy masacre gigantes inspeccionó las estacas y empujó una para comprobar su firmeza bien bien nos sirven adelante con el sacrificio ser clayton ser clayton shocks será la mano derecha o mejor dicho el brazo atrofiado de cobre le disgusta va profundamente así como fue a rick mostraba una intensa devoción por su dios rojo lo besó x era simple crueldad lo había visto junto a las hogueras nocturnas las observaba boquiabierto y con ojos habidos ama al dios sino las llamas cuando le preguntó a ser josé inciso siempre había sido así respondió con un rictus de desagrado en roca dragón se juntaba con los torturadores y le gusta echar una mano los interrogatorios sobre todos los de mujeres jóvenes no se sorprendió no le que había ninguna duda de que shocks disfrutaría mucho quemando la a menos que amaine la tormenta llevaban diecinueve días a tres jornadas de interferir sin ley de bosques peso interfaz algo menos abuelo de cuerpo pero ellos no eran cuervos y la tormenta no se sabe por las mañanas