Mujeres y adicción 🙏 Testimonios reales que rompen el silencio 84k6o

Bueno, buenos días. Hoy estamos con seis adictas recuperados, en recuperación.

Estamos aquí para charlar con ellas sobre adicción, sobre recuperación y sobre todo por cómo afecta a la adicción, cómo afecta a esta enfermedad a las mujeres.

Hablar un poco desde la perspectiva.

Gracias por atendernos, chicas.

Y quería empezar un poco para para romper el hielo blanca.

¿Te sientes cómoda hablando sobre tu experiencia? Sí, sí.

¿Podrías contarme un poco sobre ti? ¿Cómo ha sido tu vida? Pues ¿de dónde vengo? Vengo de San Fernando y bueno, pues yo he tenido una infancia bastante corriente y a partir de bueno, empecé a partir del adultez, empecé a estudiar fuera, salí a Sevilla, he estudiado medicina y...

¿Eres médico? Sí, me formé allí y después he estado trabajando en Barcelona y ahora en Europa.

En todo esto van a ocurrir muchas cosas, pero no sé qué es lo que es lo más relevante.

¿Cómo ha sido tu infancia? ¿A qué te refieres con corriente? Pues porque tengo una familia que se podría decir que es una familia estructurada, aunque es disfuncional, pero pero bueno, siempre he tenido la figura de mi padre, de mi madre, mis hermanos, soy la pequeña, he ido al colegio, he tenido amigas, no me ha faltado de nada, he tenido todas las necesidades cubiertas, por lo tanto creo que he tenido una infancia bastante buena, he disfrutado mucho.

¿A lo que te refieres a familia disfuncional, blanca? Pues eso lo he aprendido aquí, la verdad, yo antes no era consciente de eso.

Pues una familia donde no hay una comunicación, no hay una buena comunicación, donde no se habla nunca de las emociones.

No se nos han validado, no se han validado las emociones entre nosotros.

Hacen mucho conflicto.

Estaba normalizado, yo lo pensaba que era normal el discutir tanto, el que tanto enfrentamiento, al final cuando lo has visto siempre en casa consideras que es lo normal, pero después yo aquí me he dado cuenta que eso no es lo normal, que la comunicación no era buena, no ha sido nunca buena.

Y por ahí todo...

Falta de comunicación emocional.

Sí, de hecho.

¿Suele ocurrir esto en las familias? Sí, bueno, en mi caso...

¿Puede ser un síntoma de inicio de la adicción? Bueno, en mi caso, yo tengo una familia, vamos a decir, normal.

Un padre, una madre, una hermana y tengo un hermano que también es adicto.

En mi caso, sí que sé, de pequeñita yo siempre he entendido que hablar de mis emociones no era algo bueno o algo que necesitara.

Entonces, en mi familia ocurrió igual, nunca se ha hablado de emociones, de cómo te sientes.

Sí, más de necesidades, pero necesidades a lo mejor a nivel económico, académico.

Pero hablar de cómo te sientes normalmente, por ejemplo, he tenido un mal día y me encuentro mal, o tengo ganas de llorar, o tengo ganas, no sé, de aislarme porque tengo un problema, no me siento bien.

Pues yo he sentido realmente que no era necesario en mi vida, que no era necesario y tampoco ha habido un acercamiento entre las familias de ese tipo.

O sea que sí, siento que puede ser un principio de la adicción porque es muy importante pedir ayuda y entender cuáles son nuestras necesidades.

Si me siento mal, tener a alguien con quien poder hablar con él o con ella, expresarlo, porque al final la adicción nos lleva mucho al aislamiento y ya no hablas de nuestras emociones.

Típico, ¿verdad Andrea? La evitación en las familias, evitación de hablar de ciertos temas, como pueden ser los sentimientos y centrarnos 100% en objetivos, ¿no? Eso hace también, en tu caso, ¿cómo ha sido? Pues yo, por ejemplo, en mi familia, yo siempre he sido como la niña de poca, ¿no? Al final, mis padres están separados y, bueno, pues mi madre...

Con mi madre siempre ha sido un poco más de conflicto, ha sido la mano dura en mi familia.

Y yo siempre me he ido con mi padre.

Mi padre y yo hemos tenido una relación muy buena.