Los tímidos también podemos hablar en público - Martes 03 de Junio de 2025 3ci67

Bueno, pues seguimos, seguimos con más en este programa y ahora nos conectamos hasta Colombia y tengo el honor de tener a Tony Benavides.

Él es speaker internacional, comunicador, escritor, y vamos a hablar de los tímidos. También podemos hablar en pública.

Hola Vitor, ¿y cómo estás? Qué alegría saber de ti y qué alegría que me, que gracias a la tecnología nos podamos comunicar de nación a nación.

Muy buenos días. Su micrófono.

Enciende el micrófono, Tony, para que te pueda escuchar.

Hola, Dianita. Qué gusto. Sí, le escucho muy bien.

Ahora sí, ya, ahora sí, ya. Qué alegría. Buen día. Cómo estás? Bueno, aquí decimos pura vida Costa Rica.

Qué rico, qué rico. Ya iría a tu tierra, ya iría a tu tierra. Oye, Tony, vamos a hablar de. Primero me gustaría que empezáramos esta charla. Te agradezco en el alma.

Que me des la oportunidad de entrevistarte.

Sabes que te tengo un gran aprecio.

Gracias por todo lo que estás haciendo y todo lo que me mandas.

Pero la primera pregunta que te haría, por qué es tan importante aprender? Fíjate lo que te voy a decir. Hablar.

Tenemos el don de la paz, el don de poder hablar, pero no necesariamente sabemos hablar.

Sí, bueno, hoy más que nunca.

Esto es creo que la habilidad blanda más importante a nivel mundial.

Saber no solamente hablar, sino comunicarnos, porque hablar, pues los que tenemos este don que Dios nos ha dado de poder hablar, pues lo tenemos. Pero otra cosa es comunicar, es conectarnos al alma de alguien más a través de nuestras palabras.

Este es nuestro poder creativo.

Yo creo que si algo Dios nos dio a nosotros importante, pero importante y que el mismo Jesucristo lo remarcó muchísimas veces, es el poder de nuestra palabra.

Todo lo que decimos, cómo lo decimos, porque no solamente lo que decimos, es el impacto que lleva cada palabra al decirlo.

Nuestra emoción, por ejemplo, es emoción que le ponemos en nuestro tono, nuestra, nuestra forma corpórea, nuestra parte no verbal, lo que no se ve como lo decimos.

Entonces hablar es importante porque nos conecta.

Nos ayuda también a pues a emitir un mensaje como lo estamos haciendo hoy en nuestra familia, por ejemplo, a llevarnos bien, a saber cómo decir las cosas.

No es lo que se dice, sino cómo se dice en la parte, por ejemplo, empresarial.

Los vendedores, los gerentes, todo aquel que tenga que relacionarse con otro ser humano necesita sí o sí aprender a expresarse y qué mejor que hacerlo de una manera empática.

Yo digo que nosotros deberíamos siempre de pensar cada palabra que sale de nuestra boca.

Qué impacto va a tener no solamente al frente, sino conmigo mismo.

El peor verdugo de nosotros somos nosotros mismos, verdad? Y al final yo siempre le pregunto a las personas con cuál es la persona que usted habla más durante todo el día y es con nosotros mismos, verdad? Entonces cuidarnos mucho de esto que estamos hablando, porque si hay un poder inmenso en la palabra, yo digo que bueno, los que tenemos animalitos, uno dice este animalito, lo único que le falta es hablar.

Y yo creo que por inteligencia no hablan, porque muchas veces nosotros hablamos tanta cosa y no sabemos que con eso nos estamos boicoteando.

Fíjate que es muy cierto lo que estás diciendo.

Fíjate, no solo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que que brota de la boca de Dios.

Fíjate la importancia de la palabra.

La palabra puede ser alimento o la palabra puede ser veneno.

Las dos cosas. Alimento que nutre, que engrandece, que edifica a la persona, pero también puede ser veneno que destruye y puede destruir a una persona.

Qué es la timidez, mi querido Tony? Bueno, la timidez, yo creo que podría decir que soy yo.

Creo que yo soy una persona que a través de un sistema de creencias, a través de mucha violencia intrafamiliar que sufrí a través de tanto bullying.

Que sufrí, creo que fui desgastando mi parte de confianza, la autoestima.

Pero la timidez es aquello que no nos deja expresarnos, es aquello que nos mantiene cautivos de nuestras propias palabras.

Ya no salen hacia afuera, sino hacia adentro.

Y muchísimas de ellas a través de nuestros pensamientos y pensamientos negativos.

Es una jaula.

La timidez es una jaula que no permite que nosotros digamos lo que queremos y muchas veces hasta grandes conocimientos, pero que están atrás.