
Descripción de Meditaciones florales 4d6n1d
El florecer creativo tiene que ver con el jardín interior, que plantas tenemos y como las cuidamos. Reconocernos mediante la imaginación y profundización con las formas de las flores, todo el potencial creativo. La meditación floral es un ejercicio amoroso para reconocer y tatuar imágenes potentes de vida. Es recibir vida con vida, en este caso las flores. Las flores y en general la flora son las protagonistas. Es la diversidad natural del mundo vegetal. La meditación floral es fruto de la concentración en el jardín interior, de la polinización entre aprender a centrarnos en nuestro yo interior. Encontrar nuestras propias flores. 631859
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Meditación floral, lo que no corre por el cuerpo no queda en la memoria, cada hoja estampada es un testimonio visual de la flora, un recordatorio de la naturaleza propia, un tributo a la exquisita armonía de la vida.
El florecer creativo tiene que ver con el jardín interior, qué plantas tenemos y cómo las cuidamos, reconocernos mediante la imaginación y profundización con las formas de las flores, todo el potencial creativo que nos pertenece.
La meditación floral es un ejercicio amoroso para reconocer y tatuar imágenes potentes de vida, es recibir vida con vida, es en este caso con las flores.
Las flores y en general la flora son las protagonistas.
La meditación floral es fruto de la concentración en el jardín interior, en la polinización entre aprender, acentrarnos en nuestro yo interior, encontrar nuestras propias flores.
Iniciemos con la respiración, inhalemos suavemente y exhalemos, inhalar, exhalar y en ese juego del movimiento del aire vamos a encontrar el ritmo más cómodo, más tranquilo, más adecuado para recibir esta guía o estas palabras que te pueden acompañar.
A tranquilizar, a encontrar, a sembrar, a podar ese jardín, vamos pausando la respiración, alargando la respiración, cerramos los ojos y vamos escaneando, vamos a hacer un escaneo corporal, cómo está nuestro cuerpo.
Iniciamos en nuestros pies, los deditos, la planta de los pies, el empeine, hay tensión, están tranquilos, hay dolor, no hay dolor, reconocemos su forma, vamos subiendo los tobillos, las piernas y seguimos inhalando y exhalando, nuestra pelvis, la cadera, nuestro abdomen, el pecho, el cuello, los brazos, las manos, nuestro rostro, la cabeza, inhalamos y exhalamos y en este juego de la imaginación vamos a permitirnos ser.
Soy una flor, soy la forma de la flor, soy el olor de la flor, soy flor, soy flor en tierra, soy flor en el aire.
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