Matanza en el McDonalds de San Ysidro. 5j1v55

Crímenes y criminales, con Luis Martín Edvalles.

Uno de los hechos más sangrientos en la historia de Estados Unidos. Una de esas matanzas que horrorizaron a todo un país y a todo aquel que se enteró.

La masacre en el McDonald's de San Isidro. Todo empieza con James Oliver Haverty. Nació en Canton, Ohio. Enseguida tuvo polio y, a pesar de que se recuperó bien, le dejó la enfermedad una cojera de por vida. Su padre compró una granja en Pensilvania, en el país Amis en Pensilvania. Pero su madre dijo que no quería vivir con ese colectivo y pronto abandonó a la familia. Al parecer, algunos dicen que el abandono de la madre pudo causar unas profundas heridas en ese joven James.

Es 1962 cuando va al colegio local de la comunidad jesuita. Se gradúa en Sociología. Recibiría luego incluso una licencia para realizar embalsamamientos en el Instituto de Ciencias Mortuorias de Pittsburgh. En esa época conoce a su esposa, Edna. Con ella se casa en julio de 1965. Tienen una vida bastante buena. Incluso tienen dos hijos, Celia y Cassandra. Se asentaron en Mashillon, Ohio, donde James seguía trabajando en una empresa funeraria. Tuvieron un percance con un incendio en una de sus viviendas y tuvieron que volver a vivir en Canton, donde consiguió un empleo como soldador.

Y al parecer fue al mudarse a Canton donde empieza a haber un comportamiento violento en ese matrimonio. Al parecer no solo entre ellos, que también, sino también hacia otras personas. Hay diversos acontecimientos violentos registrados a nombre del matrimonio. Varias denuncias de la gente de la ciudad que lo denuncia. Y no pocas. Al parecer eran algo rotadores.

Se dice que Edna instruyó a su hija Celia para que golpease a una compañera en clase.

Ojo que incluso llega hasta el punto de que cuando esa madre exige unas explicaciones Edna la amenaza con una pistola. Incluso momentos donde James dispara a su propio perro en la cabeza ante la queja de un vecino de que el animal le había arañado el coche. James no se lo pensó y ejecutó al perro ahí mismo. Está claro, era un apasionado por las armas.

Y desde luego, en casa, tenía una buena colección de ellas.

Así pues, la violencia es algo diario en la casa de los Huberti. Edna incluso denunció a James ante el Departamento de Servicio Infantil y de Familia de Canton por haberle golpeado hasta tal punto que le dislocó la mandíbula. Los vecinos también declararon que Edna era alcohólica y que cuando estaba bebida su agresividad era muy patente, que llegó incluso a atacar físicamente a su marido.

Resulta que tanto él como ella, se golpeaban mutuamente. Y no despacio. Al parecer, la desgracia no viene sola cuando uno vive una vida violenta. Huberti tuvo un accidente de moto que lo dejó con una lesión en el brazo derecho que no le permitía moverlo bien. Esto hizo que perdiese el trabajo de soldador.