
El caso Cassandra Vera: ¿hasta dónde puede llegar la libertad de expresión? 1q2e41
Descripción de El caso Cassandra Vera: ¿hasta dónde puede llegar la libertad de expresión? 4t65b
¿Hasta dónde puede llegar la libertad de expresión? ¿Cuáles son los límites que tenemos que respetar? ¿Debe entrar el Derecho Penal a sancionar simples chistes, actos o manifestaciones "artísticas"? Constantemente vemos en medios de comunicación (no digamos ya redes sociales) personas que vierten opiniones, hacen sátiras, representaciones (...) que pueden herir determinadas sensibilidades y surge el debate de si están o no amparadas por su derecho a la libertad de expresión o se encuentran vulnerando derechos de terceros. En este episodio, vamos a arrancar con el caso de Cassandra Vera, una joven que colgó en twitter (ahora X) determinados comentarios relacionados con Carrero Blanco (presidente del Gobierno de España en el período franquista) y su asesinato, producido por la banda terrorista ETA, al colocar tal cantidad de explosivos que su vehículo acabó en el tejado de un edificio próximo; para, a partir de ahí, intentar dotar de contenido a este derecho, sus límites y sus más recientes manifestaciones, como el polémico libro sobre el crimen de José Bretón o los hechos desarrollados por Anónimo García y su tour de La Manada. 3h4k5t
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
Saludos y bienvenidos a un nuevo episodio de Distrito Criminal. Hoy dejamos por un rato las escenas del crimen físico para adentrarnos por primera vez en un terreno igual de resbaladizo o incluso más si cabe, el de las palabras. Sí, hoy nos vamos a enredar en una de esas cuestiones que a diario, literalmente a diario, generan titulares, debates encendidos y, cómo no, sentencias polémicas.
Y todo tomando como punto de partida el caso de Casandra Vera, una joven murciana que terminó en los tribunales por unos tuits sobre Carrero Blanco. Humor negro, memoria histórica, libertad de expresión, límites del humor, límites del discurso… todo bien mezclado en esa coctelera jurídica y criminológica que tanto nos gusta agitar por aquí.
Así que preparad vuestras neuronas que hoy tocan fuegos artificiales argumentativos.
Y junto a mí, como siempre, mis ilustres compañeros de podcast, David Morías Alberto Pintado y Samuel Rodríguez. ¿Habéis visto? Hoy lo he hecho todo así de corrido. ¿Qué os parece? ¿Se te ha olvidado presentarte a ti? Pero yo soy de sobra conocido en estos lares. ¿Seguimos los cuatro? Seguimos los cuatro juntos, los cuatro amigos. Aquí estamos los cuatro que hacemos el podcast, aunque a los haters nos honran con su presencia.
Hoy va a ir mucho de hate el podcast, pero esperamos no generarlo nosotros.
Hoy vamos a hablar tanto del reverso tenebroso como del lado bueno de la libertad de expresión, que es la parte del derecho fundamental, como de todos los delitos o algunos de ellos que atentan en los que se puede incurrir en uso de esa libertad de expresión.
Hoy es el día para que Ángel, que es el especialista en derecho constitucional de los tres, hombre, claro, que aunque no lo haya parecido hasta la fecha, los tres de derecho penal criminología somos David, Alberto y Servidor, pero él es un asimilado que no desentona para nada.
¿No te ha gustado el asimilado? Sí, sí, sí, yo soy un representante de las fuerzas del verón.
Este es su campo, o sea, prepárense para ver brillar al doctor Covacho.
Efectivamente, Ángel destaca en derecho constitucional y nosotros en derecho penal y criminología.
Entonces, algo sabemos de delitos y de códigos penales y de leyes, lo que dicen los tipos penales, para quien no lo sepa, son los...
Las descripciones de las conductas.
Y dónde pone lo que es violación y lo que no es violación, excepto los jurídicos penales.
¿Violación por qué? Lo explicamos todos los años en clase a nuestros alumnos.
Sí, nuestros estudiantes sí que lo saben.
Estáis con vuestras rencillas y vuestros rencores y no me vais a dejar brillar, como me merezco.
Vamos con el caso de hoy, entonces.
Nos lo va a presentar la propia protagonista, Cassandra Vera.
A gente conocida le puede pasar lo que es cargabe censurada y en un juicio.
A mí me pasó hace tres años que fui con 20 años detenida, con 21 condenada y con 22 absuelta, por escribir en Twitter chistes sobre Carrero Blanco.
A priori es algo absurdo cuando toca contarlo, pero la sensación que te ocurre cuando vives eso es, en primer lugar, nunca piensas que te puede ocurrir a ti.
Nunca piensas que algo que le está ocurriendo a gente que se puede dedicar al humor o a cosas más políticamente incorrectas, no piensas que eso pueda pasar a una persona del día a día.
Yo un 13 de abril de 2016, con la única preocupación en mi cabeza de voy a suspender el examen que tengo hoy, acabo detenida y puesta en libertad hasta la fecha del juicio, por lo que he contado, por hacer bromas en Twitter.
A partir de ahí, cuando te ocurre eso, tu mundo cambia completamente.
Empiezas a tener que mirar cómo vas a defenderte legalmente, a qué condenas te puedes enfrentar porque puedes acabar en la cárcel.
Comentarios de El caso Cassandra Vera: ¿hasta dónde puede llegar la libertad de expresión? 1e5y2p