#7. Comprender el mundo actual con José Antonio Lozano 5c3x4z

Cuídese el espacio en donde las grandes ideas, las preguntas importantes y los protagonistas inspiradores se encuentran cada semana.

Descubre las historias, las visiones y las experiencias de las personas que están transformando el mundo. Súmate a la conversación con Francisco García Pimentel.

Buenos días a todos y bienvenidos a Cuid, el día de hoy José Antonio Lozano Díez, a quien conozco desde antes de que fuera rector y fuera un hombre famoso en todo el país. Es un destacado académico, conferencista y pensador mexicano, reconocido por su liderazgo en temas de filosofía, derecho y ética. Hoy es presidente de la Junta del Gobierno de la Universidad Panamericana y el IPADE.

Con una sólida formación en Derecho y Familia, Lozano Díez ha dedicado su carrera a la reflexión profunda de los valores humanos, a la educación, a la formación y liderazgo empresarial y la trascendencia de la vida cotidiana. Es autor de varias obras, entre ellas Sociología Jurídica y coautor del libro más reciente La Conquista de la Madurez en coautoría con el padre Francisco Ugarte, donde exploran las múltiples dimensiones del desarrollo humano integral.

Su influencia se extiende también ahora al ámbito digital, donde sus artículos y conferencias y entrevistas abordan desde la ética en la educación hasta los desafíos de la sociedad contemporánea, inspirando a líderes y pensadores a nivel global. El día de hoy exploraremos con José Antonio esta pues redefinición del modelo universitario del mundo del siglo XXI y también recordando cómo liderazgo ético puede cambiar al mundo. Todo esto. José Antonio, ¿cómo estás? Hola, quedo Francisco, muy buenos días.

Me da mucho gusto estar contigo y el auditorio que escuche este programa. Muchas gracias. Quiero empezar hablando de ti. Cada semana te escuchamos y te leemos hablando de distintos temas, pero quizás hay partes de tu historia que no son tan conocidas para el público y me gustaría explorarlas. Yo he tenido el privilegio de, hombre, no diría acompañarte, pero sí de alguna manera estar presente o estar acompañando al menos a la lejanía ciertos momentos de ese crecimiento profesional y familiar que ha sido impresionante.

Pero yo quisiera preguntarte este camino de abogado, abogadito, litigante, profesor, director y rector. Cuéntanos un poco de ese camino y si ese es el camino que tú tenías planeado.

En realidad la vida, Francisco, siempre nos da sorpresas. Uno propone y Dios dispone, indiscutiblemente. Yo estudié efectivamente la carrera de derecho con la idea de dedicarme a eso, ejercer la profesión de abogado y empecé mis primeros años como pasante en un despacho en materia fiscal, de derecho fiscal. Mis primeros años pasé por ahí. Tiempo después estuve en el sector financiero, trabajé en un banco, en el jurídico de lo que hoy es BBVA, en esa época se llamaba Bancomer.

Terminé algún tiempo también trabajando en el gobierno. Estuve en la... fui director jurídico en la Comisión Federal de Competencia. Pero años, en esos años, dada pues una serie de circunstancias, entre ello el plan que tenía yo para casarme, el ofrecimiento que me hizo quien entonces era un gran director de la Facultad de Derecho de la Universidad Panamericana en su sede en México, de MISCUAC, que era el doctor Roberto Ibáñez, me hizo a trabajar con él.

Tomé la decisión, todavía hoy no te sé explicar por qué ni cómo, yo creo que mucho tuvo que ver que ya estaba cerca de casarme, le había dado el anillo de compromiso a mi esposa, hoy, Tere, y me ofrecía la posibilidad de hacer el doctorado fuera. Y eso implicaba y sea vivir fuera un tiempo. Yo creo que todo eso influyó en una decisión que tomé de cambiarme de la vida de un abogado que trabajaba en el foro, como cualquier otro, a pasar a la vida académica. No tenía que los primeros tiempos, me entraron muchas dudas.

Cuando recién había llegado a la UPE y empecé a ver lo que eso era, no me acoplaba mucho y no era lo mío, y entonces empecé a tener ahí como dudas de qué hice, cómo fue que entré aquí. Pero la vida, estuve un primer año en la universidad antes de casarme. Ya casado, tuve la oportunidad de irme a España a hacer el doctorado a la Universidad de Navarra, en donde también tuve una gran suerte, yo lo digo es la providencia divina, en dar como director de tesis, algo que tampoco lo había yo previsto, con Alejandro Llano.