
Descripción de 269 Lo que dé tiempo 1l323w
En lugar de dejarnos atrapar por el nerviosismo cuando tenemos varios frentes abiertos, tendríamos que ponernos con el primero sin obnubilarnos con más. También puedes seguirme en Facebook, y si te gusta este audio, por favor dale un “me gusta”, suscríbete a mi canal y COMPÁRTELO en tu entorno, ¡¡GRACIAS!! x5w21
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
Lo que dé tiempo.
No es una máxima, pero creo que en atención a nuestra actual forma de vivir sí debería convertirse en tal.
Y si considero que esa expresión habría de transformarse en regla a seguir es porque gran parte de nuestra existencia nos la pasamos con el agobio persistente de contar con demasiadas tareas y no disponer del tiempo suficiente para realizarlas.
Así que yo creo que haríamos bien en itir, interiorizar y aplicar las enseñanzas populares procedentes de refranes del tipo «quien mucho abarca poco aprieta» o «no por mucho madrugar amanece más temprano» o «vísteme despacio que tengo prisa» o semejantes, porque todos ellos nos hablan del error que comporta intentar acaparar más de lo que nuestra capacidad permite.
No sólo por el hecho de que resulta inasumible porque sí, sino también porque abordarlo alberga la casi seguridad de ejecutarlo mal o defectuosamente, de cometer traspíes, descuidos o desaciertos.
Porque todo, incluso lo más aparentemente simple, sencillo y fácil, precisa un rato, extenso o limitado, una dedicación, un cuidado, una atención y un esmero, por nimio que sea.
Y es que a veces perdemos los papeles buscando resolver, en menos plazo del que procede y del que es prudente, asuntos que exigen más calma y más celo del que, por las circunstancias que sean, podemos prestarle en ese momento.
Y no hay que rasgarse las vestiduras por ello, sino aceptarlo, asumirlo y actuar en consecuencia, todo lo cual obliga a que nos planteemos las modificaciones que sean pertinentes, que pueden recoger varias acciones posibles.
Bien anulación, decidir dejar de lado, pese a todo, alguna de las cuestiones, por inconveniente, por inoportuna o por carente de verdadera importancia, frente a otra o frente a las demás.
Bien posposición, concluir como adecuado, demorar su cumplimiento hasta disponer del entorno que demanda.
Bien reducción, estudiar la posibilidad de realizar una sustracción de pasos en el desarrollo concreto de alguna, para avanzar en su culminación.
Concienciarnos debidamente, aceptando que hemos de hacer lo que nos dé tiempo, sin flagelarnos por el hecho de no poder llevar a cabo más, es la clave, puede ser lo que cambie todo, porque sólo por el hecho de marcarnos ese propósito, disminuye la presión que sentíamos, se suavizan los efectos de todo cuanto figuraba en nuestra agenda como cosas pendientes.
Y lo que es indudable, es que si se atenúa ese apremio, es mucho más probable que desaparezca o se mitigue el amenazante colapso, sin quitar mérito a que además, situándonos en ese Lo que nos dé tiempo, de modo casi inconsciente e inmediato, nuestro cerebro organiza y escalona todos nuestros cometidos en base a su trascendencia y urgencia.
Comentarios de 269 Lo que dé tiempo 3u4r2o