
Descripción de 263 Aferrarse a lo bueno 6q5m5n
Permitirnos disfrutar a placer de lo bueno de que dispongamos no sólo no es reprensible, sino tarea obligada en nuestra vida. También puedes seguirme en Facebook, y si te gusta este audio, por favor dale un “me gusta”, suscríbete a mi canal y COMPÁRTELO en tu entorno, ¡¡GRACIAS!! 5z166d
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
¡Aferrarse a lo bueno! Con esta expresión pretendo aludir a cuando nos sentimos en pleno apogeo de un momento apacible o agradable y en lugar de deleitarnos con ello, nos comemos la cabeza trayendo a nuestro pensamiento su próximo final o lo que vaya a venir a continuación, que probablemente tampoco nos resulta especialmente seductor o apetecible.
Es ahí, desde mi punto de vista, donde debemos evitarnos ese castigo malsano de no sólo no permitirnos disfrutar del presente, sino de torturarnos con lo que puede venir a posteriori.
Igual que cuando existe alguna amenaza en nuestro horizonte o nos domina alguna preocupación, tendemos a verlo todo de color más oscuro, de imaginar males mayores y de atraer malos augurios, deberíamos aplicar esa misma tendencia contagiosa a las ocasiones en que nos inundan sensaciones favorables.
Porque conocemos la fórmula, sabemos cómo proceder para que algo determinado se propague y se transmita veloz, por lo que lo más inteligente es aplicarlo a lo que nos produce bienestar y tranquilidad y conseguir que se extienda, que adquiera fuerza y peso y que se expanda en todas direcciones.
Y rizando más el rizo, parece una invitación a reflexionar sobre cómo podemos construir algo bueno o inventar algo bueno o extraer algo bueno de una situación o de una circunstancia que parece no entrañarlo, porque se puede a poco que nos volquemos en el intento.
Y de esa manera, forzándonos a encontrar algo ventajoso donde ni por asomo parecía hallarse, vamos fraguando una nueva forma de actuar que tiene mucho de provechosa, porque que propicia y coadyuva a que nuestro carácter se vea mucho más inclinado a buscar de qué agarrarse en instantes difíciles, para entender de modo mucho menos severo y serio incluso los reveses que puedan arremeter contra nuestra tranquilidad.
Además, eso nos dota de un poder adicional, como es el de lograr que lo bueno no se circunscriba únicamente a aquello que lo sea de por sí, sino que también englobe lo que está en nuestra mano conseguir.
Y es que nada más efectivo para apagar el miedo y la aprensión que decirnos que todo va a ir bien, que todo va a salir a la perfección y que todo va a superar hasta nuestras mejores expectativas, porque entonces lo negativo se difumina hasta casi desaparecer y porque conjurar lo positivo, no lo olvidemos, hace que se manifieste lo positivo.
Regodearnos y explayarnos con lo bueno que nos afecte, nos incumba o nos toque, no sólo no hemos de considerarlo como criticable o censurable y mucho menos como algo de lo que debamos avergonzarnos o por lo que debamos sentirnos culpables, sino que tenemos que entenderlo como algo aconsejable, necesario y oportuno en cualquier escenario.
No te sientas mal por dejarte llevar y olvidar las responsabilidades y deberes de siempre, no por norma, pero sí de vez en cuando date un respiro y aférrate a lo que te hace feliz.
No te sueltes.
Comentarios de 263 Aferrarse a lo bueno n1r3r