Es el momento (Estos días te pueden dar una plaza) 3m121i

Es el momento. Estos días te pueden dar una plaza. Muchos inscritos dentro de tu tribunal ni siquiera se van a presentar. Otros se presentan pero en modo zombi, sin preparación real, sin ilusión, sin cuidar los detalles. Hay opositores que abandonan la recta final por presión emocional o creencias limitantes. Hay opositores que hacen muy bien el tema pero el supuesto práctico no han hecho ninguno, meten la pata y viceversa. Hay opositores que les encantan los supuestos prácticos y que en el tema no han estudiado absolutamente nada.

Luego hay opositores que son dos tercios, que la primera parte la van a hacer genial pero la programación la tienen hecha un desastre o tiene la programación bien pero no han ensayado lo suficiente o no tienen una buena exposición. Lo que te quiero decir es que no hay tantos opositores y opositoras comprometidos que cuidan los detalles y que van en serio. Y sé que tú, sí tú que me estás escuchando, por ti no va a quedar y vas a dar tu 100%.

Lo que te quiero decir también es que la confianza y las sensaciones pueden ser un arma de doble filo. No quiero que confíes en ti a modo de Mr. Wonderful, sino que confíes en tu trabajo, que confíes en la recta final, que confíes en esa milla extra, que confíes en ese simulacro extra, que no te creas tus debilidades. Yo en mi caso hice más de 20 simulacros de tema, pero los últimos recuerdo que no me salieron muy allá. Entonces yo no dije, madre mía, el simulacro número 19 me ha salido fatal, el día del examen lo mismo, lo voy a hacer mal.

No, no, yo confié en mi trabajo, confié en la inercia, en todo lo que podía escribir. Y yo no me puse a comparar con el resto de opositores. Había opositores que me explicaban muchas cosas. Yo me enfoqué en estar preparado a nivel mental y a nivel de trabajo en cada uno de los apartados. Mucha gente a dos semanas, a una semana, a tres semanas, a cuatro, dijo, mira, yo ya está todo el pescado vendido, es momento de bajar el pistón. ¿Ya sabes lo que hice? Milla extra. La milla extra marca la diferencia. Las últimas semanas miré supuestos que me salieron el día del examen.

Los últimos días hice exposiciones extra que me dieron naturalidad y me dieron ideas de materiales que al tribunal, sinceramente, le encantó. La práctica final, la inercia que coges al final, sobre todo a través de tu trabajo, te predispone a sacar la plaza.

Así que concentración. El momento es ahora. Hay mucha gente que se prepara increíble, pero en la recta final mete la pata. Sé que tú no eres así. Y los mini simulacros, los simulacros, los rituales, la evocación, es momento de 70-80% de tu tiempo repasando activamente, exponiéndote a condiciones reales de examen, sabiendo cómo puedes planificarte, cómo puedes ensayar el inicio, tener la estructura clara del supuesto, repasar a nivel de propuestas prácticas, si tienes que ensayar, controlar las muletillas, mejorar las metáforas, tener muy claro esos inicios, esos piñones fijos para los temas, tener muy claros soluciones comunes a diferentes supuestos. Es el momento. Pero cada día te pido, de aquí al examen, mini simulacros o simulacros completos. Que la habilidad que te vayas a encontrar esté más que practicada.

Diego, es que solo he hecho uno o dos supuestos, uno o dos simulacros. Es momento de ahora de hacer. Es momento de ahora introducir esa práctica masificada. Es momento. No es momento de rendirse. El coste de oportunidad es enorme. Te rindes, estás fuera. Lo intentas, es posible que aparezca la oportunidad y es posible que cojas la plaza.

Y aquí te pido que cuides la mente en la recta final. No des protagonismo a las dudas ni a la queja. Tus dudas no aportan absolutamente nada. Va a haber quejas en tu mente, va a haber conformismo. Genial. Te lo da tu mente, pero tú actúas. Tú actúas en disonancia a eso que te da tu mente. No alimentes pensamientos como no estoy preparado o hay demasiada gente mejor que yo. Tonterías. Lo único que te predispone a hacer una buena posición hoy por hoy es tu trabajo. Y desconecta brevemente si es necesario, pero sin romper la dinámica del esfuerzo.

Y no juzgues ni te dejes influir por otros. Hay historias de opositores que fueron prejuzgados por su ropa o por su actitud y acabaron sacando notazas. A mí me juzgaban, me veían como el novato. De hecho, cuando me saqué la plaza, muchos se sorprendieron y dijeron, Diego, ¿tú? Si no participabas en clases, si no lo parecía, no tenías experiencia docente. Es que no va de que juzgues a los opositores, va de que trabajes. Y también de comentarios que te puedes encontrar tras la prueba. Si no, pues nada.