4 · Ánjel. De profe de lengua y literatura a escritor y corrector 5991k

Bienvenidos y bienvenidas a Exprofesor, el podcast donde Migue, un maestro en plena reflexión sobre su futuro, cuestiona no solamente su carrera, sino también las decisiones de quienes como él han decidido dar un giro a su vida profesional.

Aquí exploraremos historias de educadores que han saltado del aula y se han reinventado.

Y ahora cuéntame tú, ¿te atreves a cuestionarlo todo sobre tu puesto docente? Si es así, acompáñame, porque este también es tu espacio.

Bienvenidos a este cuarto episodio del podcast Exprofesor, donde por fin estamos aquí con nuestro primer profesor que se ha reinventado y que ya puede decir eso de que es exprofesor.

Ángel María Fernández, riojano, 52 años, licenciado en filología hispánica y posgraduado en corrección y asesoramiento lingüístico.

Es autor de varios títulos publicados de poesía, novela, humor, cine y traducción.

Entre ellos vamos a destacar A Vía del Verbo Haber, diario del Instituto, por el tema que nos atañe.

Actualmente, además, se dedica a la corrección y redacción de textos en TheIncognito.es.

Bienvenido Ángel, ¿cómo estás? Hola Miguel, bien hallado, muchas gracias.

Lo primero, antes de nada, agradecerte que te hayas prestado a esta entrevista, o bueno, como yo lo llamo, conversación, por eso de que no soy periodista ni nada que se le parezca.

Mejor, gracias, te lo doy yo a ti, sí.

Muchas gracias por venir a contarnos tu experiencia, como persona que se dedicó a la enseñanza y que decidió dejarla, eres el primero que recibo en este podcast y es todo un honor empezar contigo.

Ya he visto que has hablado en otros contextos del tema, no solo en tu diario del Instituto, al que vamos a ir recurriendo poco a poco, sino también recientemente en un reportaje de televisión.

Así que muchas gracias.

Nada, gracias a ti, el honor es mío.

Bueno, pues me gustaría empezar con una pregunta inicial, simple y directa.

Haciendo un poco de memoria y balance en tus años de docente, si tuvieras que definir tu etapa como docente en una palabra o en una frase, ¿cuál sería? Una palabra o una frase es difícil, pero a lo mejor sube y bajas, y yo creo que es una montaña de emociones las que uno vive, sufre en el trabajo como profesor.

Quizá esa suba y baja alterna, va cambiando, cuando comienzas tienes mucha energía y cualquier cuesta arriba con esa energía y esa fuerza es fácil de superar, y yo creo que a medida que van pasando los cursos y los años, ese suba y baja a veces se empina demasiado y las pendientes se hacen cada vez más difíciles de soportar.

La verdad que una metáfora, la de la montaña, yo a veces la defino como rusa, ¿no? Cuando hablamos de pendientes, es verdad que ya se vuelve una montaña a secas.

Igualmente, sí.

Bueno, pues hablando precisamente de lo que has dicho tú, de los primeros años, me gustaría ir contigo a esos comienzos. ¿Cómo llegaste tú a la docencia? ¿Fue vocacional? ¿Fue casual? A mí me nació la vocación mientras estudiaba la carrera de filología hispánica, que yo comencé tarde, porque primero yo estudié marketing, publicidad y relaciones públicas, unos estudios que abandoné a la mitad.

Pasé por una escuela de artes y fue allí donde descubrí que lo que quería ser era escritor, pero también les había dado el palo, si se puede decir así, a mis padres ya durante tres años, entonces tomé la decisión de ponerme a trabajar y cuando, pensando que cuando tuviera dinero, volvería a los estudios y así estuve trabajando en mil cosas.

Tuve un bar de copas con amigos y a los 25 años compaginé el trabajo con los estudios, así que fui ya un estudiante de filología hispánica, te ayudo. Y desde el principio, desde el primer año de la carrera, ya comencé a trabajar, sobre todo en época de verano, en todas las fiestas tipo Semana Santa y Navidad, con un amigo que estudiaba magisterio, planteamos clases, bueno, un poco lúdicas de lectoescritura.

Enseñamos a los chicos a escribir relatos a través de, como digo, de la lectura y yo creo que desde el principio aprender lengua y literatura me impulsó a querer enseñar lengua y literatura y, como digo, pues casi casi a la par que aprendía el oficio, pues lo que lo quería también, lo quería practicar. Qué interesante, ¿no? Que ya desde los estudios, o sea, ya desde el comienzo.

Hay gente que dice que lo tiene desde antes de los estudios, pero que tú lo hayas ido descubriendo y bueno, y poniendo en práctica, es lo que me parece más interesante en esos veranos. Después fui alternando, como digo, esos fueron algunos años que hacíamos.