Ep. 8 Mitos de la terapia sexual de pareja 6d347

Bienvenida, bienvenido a Escuchado en Terapia, el podcast de Rosario Castaño y de Ricardo Gallego, donde charlamos sobre los asuntos que nos interesan de la terapia, las relaciones de pareja, la sexualidad y muchos otros temas. Empezamos.

Hola, Charo, ¿qué tal? ¿Qué tal, Ricardo? Muy bien. Con ganas de empezar de nuevo.

Muy bien, pues aquí estamos otro día, hoy para tratar un tema de los que nos gustan a nosotros, un tema muy frecuente en la terapia, que son los mitos de la terapia sexual de pareja.

Bueno, tuvimos un encuentro, el tercer encuentro multidisciplinar de sexualidad y salud de la mujer que organizamos tú y yo junto con la Clínica Palacios el pasado 10 de abril, aquí en Madrid. Y bueno, tuvimos la suerte de contar con ponentes de primer nivel y de hablar de temas muy interesantes sobre la salud de la mujer y la sexualidad.

Y el tema que a nosotros decidimos abordar allí, los mitos de la terapia sexual de pareja, es un tema que vemos con mucha frecuencia en la consulta. Y es un tema que de manera espontánea tú y yo hemos comentado muchas veces. Y bueno, ya cuando estábamos escribiendo el libro de terapia sexual relacional, salían muchas veces en el libro, porque son temas muy frecuentes, que de manera muy muy frecuente nos cuentan, nos preguntan, nos comentan. Y bueno, son mitos, porque al final los mitos son parte de nuestras creencias, que vamos incorporando, que forman parte de lo que vemos, de lo que escuchamos, de lo que la cultura que nos rodea, se va incorporando a nosotros.

Y lo vamos incorporando sin darnos cuenta. Y luego eso forma parte de lo que esperamos que ocurra en la pareja. Y bueno, pues a veces es verdad que si no te paras a pensarlo, o si no te pregunta alguien y te cuestiona el mito, pues oye, lo das por cierto. Claro, porque yo creo que para entender cuáles son las demandas principales de pareja, que es lo que vamos a ver hoy en consulta, en la terapia sexual, tenemos que tener en cuenta que esas demandas siempre están cargadas de falsas creencias, de mitos, de tabúes. ¿Por qué? Porque en la relación de pareja predomina mucho las emociones, sobre todo cuando hay conflicto.

Y las emociones, Ricardo, si te fijas, y lo hemos hablado tú y yo, las emociones son individuales, no se comparten. Digamos, se manejan a través de la impulsividad, son muy impulsivas, no pasan por la reflexión. Mientras que los sentimientos se comparten, tienen una temporalidad, facilitan el diálogo, facilitan una narrativa, que es lo que vemos en consulta. En consulta intentamos abordar los problemas para que podamos crear una narrativa que tenga sentido. Cuando vienen las parejas a consulta con unas demandas tan fuertes de conflictos, normalmente vienen cargados de emociones. No aparecen los sentimientos por ahí todavía.

Claro, porque eso requiere un diálogo. Bueno, es verdad que nosotros, si tuviéramos que decidir cuáles son las principales áreas de conflicto, que esto es algo que nosotros vemos en la clínica y que también está publicado en los libros de terapia de pareja, los principales áreas de conflicto serían la comunicación o, mejor dicho, una comunicación insuficiente o dificultada, dificultosa. La confianza o más bien la falta de confianza para compartir las emociones y los sentimientos. La intimidad y la sexualidad, que es básicamente a lo que hoy vamos a dedicar el episodio. Las familias de origen de cada miembro de la pareja. Has tocado las cuatro patas.

Las cuatro patas y hay una quinta que sería un poco, bueno, pues lo periférico de la pareja, pero que nos toca de lleno, que sería la crianza de los hijos, los problemas de salud, la economía, en fin, las cuestiones que pueden apartar tu mente del encuentro con la pareja porque estás muy ocupado en otras cosas.

Claro, porque si nos centramos en todos los problemas de intimidad y de sexualidad en la pareja, yo insisto, nos encontramos con todos los mitos y las falsas creencias porque aparecen mucho los roles de género y el género, que ya lo he dicho otras veces aquí, insisto mucho siempre, es como el oxígeno que respiramos. Nosotros no somos conscientes de eso.