Desayuno-coloquio con José Luis Martínez-Almeida 2i3v2t

Jugar gestión, visibilidad y diálogo político en una ciudad que siempre es el punto y centro de tantas miradas. Me gustaría darle un aplauso por el éxito, improvisación y agilidad que tuvo el alcalde el día del apagón. Nuestro alcalde siempre se pone en lugar de los madrileños cumpliendo lo que dijo Le Corbusier, una ciudad hecha para el éxito es aquella que respeta a quienes la habitan.

Compartimos mesa con Mariano Alonso, redactor de la sección de España en ABC, y con Alberto Prieto, subdirector del Español. Ellos van a iniciar una conversación con el alcalde y después yo iré dando la palabra a aquellos que me hagan llegar sus preguntas con letra y imprenta. Espero que la prensa que estáis, que veo como cinco cámaras, me paséis una pregunta y demás que queráis y os iré dando la palabra. Así que yo creo que Mariano, Alberto, cuando queráis arrancamos.

Buenos días, Mariano. Hemos quedado antes con el alcalde que de fútbol no vamos a hablar porque no es un buen año para ninguno de nuestros equipos aquí en la ciudad, así que mejor obviar el tema, ¿no? Bueno, espérate que el domingo todavía lo podemos arreglar.

Bueno, bueno, sí, eso le he dicho a mi hija, pero con poca confianza. Yo creo que podemos empezar por el apagón directamente, porque además es el asunto candente y porque además ahora mismo se está produciendo la comparecencia del presidente del Gobierno en el Congreso.

Por favor, un poquito de silencio, porque si no...

A expensas de cómo evolucione, bueno, la primera parte que hemos podido ver, el presidente insiste, alcalde, en que es robusto, es uno de los sistemas más fuertes del mundo y no sé qué piensa el alcalde de ese mensaje que traslada el presidente apenas unos días después del incidente.

Muchas gracias, Mariano, y en primer lugar agradecer al Club Silo 21, a su presidente que está aquí, a José María Barreda, a la vicepresidenta que nos modera en esta mesa, a Palomas, y como tanto a Alberto como a Mariano, poder estar aquí, a la vicealcaldesa y concejales del Ayuntamiento de Madrid, al portavoz del Grupo Parlamentario Popular, a todos los que han tenido la delicadeza y la gentileza de poder acompañarnos en este desayuno y poder compartir las reflexiones y las preguntas tanto de Alberto, de Mariano como de los demás medios de comunicación que pueda haber aquí.

Es inevitable, efectivamente, empezar por el apagón, tanto por lo que sucedió como porque hoy es el debate en el Congreso de los Diputados.

El apagón, en mi opinión, retrata perfectamente la estrategia de Pedro Sánchez, que es la permanente huida hacia adelante.

El apagón fue un hecho gravísimo, que no teníamos precedentes en España, por supuesto, que hay muy escasos precedentes en el mundo, que todo un país se hubiera quedado sin energía eléctrica y que no se puede despachar simplemente con una comisión independiente que depende de la vicepresidencia tercera del Gobierno y decir al mismo tiempo que esto va a llevar meses saber qué es lo que pasó.

Como ya saben lo que pasó, necesitan tiempo para engañar a los españoles, porque yo no tengo ninguna duda de que el Gobierno y Pedro Sánchez saben lo que pasó, porque todos intuimos qué es lo que pasó y casi lo podemos decir todos con certeza, que aquí hay una cuestión de política energética que se sustenta sobre una visión dogmática, no ideológica, sino una visión dogmática acerca del papel de las renovables y acerca del papel de la energía nuclear y que, por tanto, en ese permanente esfuerzo de Pedro Sánchez de imponer sus criterios, insisto, no políticos, sino dogmáticos, lo que sucedió y yo creo que todos somos conscientes, es que se produjo una interrupción brusca, que esa interrupción brusca se intentó suplir con el mix de renovables y que el mix de renovables no fue suficiente porque no tiene estabilidad, lo digo de manera bastante profana, pero esto es realmente lo que todos sabemos que sucedió y Pedro Sánchez lo sabe, pero como Pedro Sánchez sabe que los españoles por aquí no van a pasar, porque la paciencia de los españoles no es infinita, tiene que decir, vamos a dar la patada para adelante, vamos a elogiar el papel cívico que tuvieron los españoles, que por supuesto lo tuvieron, vamos a decir y transmitir que tampoco está tan mal quedarnos nueve horas sin luz, como ya han dicho algunas personas en el ámbito público, porque nos permite recuperar, es decir, dulcificar, blanquear el hecho verdaderamente grave, que es que el que era el mejor sistema eléctrico del mundo, según nos había dicho el gobierno de Pedro Sánchez y según nos había dicho Beatriz Corredor, que el sistema eléctrico en el que nunca podía pasar lo que sucedió, sin embargo, efectivamente sucedió. Y en vez de entender y asumir cuáles son las causas de lo que sucedió para evitar que vuelva a suceder, prefiero decir que no.