Deporte es Salud: Programa 11 3x1cp

Radio URJC Deporte es salud Muy buenas a todos y bienvenidos a Deporte es Salud, un espacio de Radio URJC donde exploramos cómo el deporte transforma nuestra vida desde la salud física hasta el bienestar emocional.

Somos Alejandro Ruzcaro y vengo acompañado con mi colega Silber. ¿Cómo estamos? Muy bien.

Y bueno, hoy les traeremos un programa repleto de contenido que no querrán perderse.

Como siempre, dividiremos el programa en tres grandes secciones.

Hablando de las noticias más importantes de la semana a nivel deportivo, luego nos sumergiremos en el mundo del baloncesto y finalmente hablaremos de hábitos saludables. Pero antes que nada, ¿qué tal Silber? ¿Qué tal la semana? ¿Cómo has vivido el apagón de ayer? Porque madre mía. Pues a ver, personalmente no me afectó mucho a mí ni a mi familia, porque es verdad que nos pilló todos en el pueblo, estábamos de fiesta, no fui a clase yo, ni mi hermana, ni así y tal. A mi novia sí que le pilló en el Gregorio Marañón, que está haciendo las prácticas y ya vive eso.

Tuvo que andar una hora y media desde el Gregorio Marañón hasta el Zoo, que es donde trabaja su padre, que tuvo un momento así de internet en el cual pudo mirar a Google Maps y fue andando.

Pero bueno, a mí por suerte me pilló más en casa, en casa de mi abuela, tal, por la calle y no me pasó nada, o sea, para mí bien.

Y ya luego fuimos a mi casa y estuvimos... allí luego vinieron mis amigos, me llamaron a la puerta y dimos una vuelta.

Y bien, o sea, dentro de cabe yo un día más, eso lo estaba hablando antes de empezar el programa, que a mí un día más no me hubiese importado para nada.

Yo no lo hubiera aguantado.

Estoy malacotumbrado de las cosas, de la electricidad, pero es que en mi casa no se podía ni cocinar.

Era bueno, era terrible. De hecho ayer, vamos, no podía ni estudiar, no podía hacer nada, estaba muy aburrido y el hecho de que me me pilló mal, tuve que coger un bus, que tal, es el ternizo en venir, pero bueno, al final bien, luego después cuando vino mi familia y tal, guay, pero estaba solo en casa y vamos, me quería...

Es que encima no podía ni bajar a calle, ni hacer nada, porque no había colegas, no podía, no había forma de ponerme de o con ellos ni nada, o sea, terrible, terrible. O sea, a mí no...

A mí no me vino muy bien el apagón.

Y por suerte pues pasé por casa por casa y pues llamaron a los timbres, ¿sabes qué es lo que hicieron mis amigos? Fueron casa por casa y fueron llamando a los timbres, llamando a la puerta.

Hasta que ya Rúguiro era al escuadrón.

Claro, es que vosotros vivís en un pueblo donde, claro, cada uno tiene como su casa, le llamas al timbre a las puertas y ya está.

A ver, si dices algo, por ejemplo, es que es verdad que, quitando uno o dos, a lo mejor de pisos, pero bueno, que las puertas muchas veces, cuando era esa situación, se quedaban como abiertas, la gente las dejaba abiertas, por si acaso, y llamabas a la puerta ya del piso como tal.

Yo, yo es eso, que, madre mía, lo viví bastante mal.

Fue un día, en verdad, yo estaba emparanoyado de que, bueno, mis familiares estábamos emparanoyados de que iba a durar más de un día y bastante mal, la verdad, pero bueno.

Por cierto, ¿qué tal el gimnasio y eso? ¿Has podido ir últimamente? No, la verdad que no, o sea, no me ha dado nada de tiempo, porque eso fue, tuve la Semana Santa, fue, creo que fue un día, y luego ya empezaron las fiestas de mi pueblo y es que no...

La verdad es que no me ha dado nada de tiempo, o sea, ayer ha empezado ese puente de mayo...

Claro, habéis estado de fiestas.

Es que claro, he estado de fiestas, he estado de fiestas, ese puente de mayo, el lunes que viene ya...

O sea, si hoy no voy por la tarde, o sea, hoy y mañana ha pasado, a lo mejor algún día bajaré seguramente, pero ya el lunes, pues, le tomo otra vez el ir normalmente, pero me ha gestado eso de Semana Santa, que después de Semana Santa me vieron las fiestas de jueves a domingo, ahora el puente de lunes, al otro día, ahora el puente de mayo...

Sí.

Que aparte que no es tan poco solo que tú, es que también en el gimnasio solo habrá hasta la una y media, ¿sabes? Que vas pronto o no vas.

Ya, es que...

Madre mía, y por cierto, los exámenes se acercan.

Sí, veinte días, tío.

Veinte días, es que no queda nada.

Ni un mes.

O sea, ¿y qué tal? ¿Has estado estudiando más o menos? ¿Qué tal lo llevas? No, la verdad que no.

Ah, cero.

De hecho es que tengo que terminar estos trabajos, es que no sé estudiar, es que tengo que terminar cosas de trabajo, ¿sabes? Sí.

O sea, no, no, no.

Bastante regular, eh.

Y es que me he organizado para, más o menos, llegar a tiempo a un examen.

Es que es una asignatura que tiene muchísimo contenido, pero exagerado, y digo, pero...