Cita con Rama - Arthur C. Clarke - cap. 37-39 1j133n

La luna deslumbrante asoma entre los árboles la oscuridad de la noche lo inunda todo y una tenue niebla comienza a aparecer adéntrate en el bosque busca el árbol viejo siéntate a su lado ponte cómodo cierra los ojos y escucha la historia que traen hasta ti las criaturas de la noche bienvenidos estos son los cuentos del bosque oscuro si te gusta lo que hacemos recuerda suscribirte es totalmente gratuito y estarás al tanto de la aparición de nuevos audios si lo que quieres es apoyarnos porque te gusta nuestro contenido puedes hacerlo como mecenas así por muy poco tendrás al contenido exclusivo para fans para ello ve a la página principal de nuestro podcast y pulsa en el botón apo hollar y recuerda darle a me gusta antes de que acabe el audio que no se te olvide quién sabe qué horribles pesadillas nos aguarda despues cita con rama de arthur c clark capítulo treinta y siete el misil el misil estaba todavía cinco millones de kilómetros cuando el resplandor de sus propulsores de frenado se hizo claramente visible desde el principal telescopio del endeavour para entonces el secreto había dejado de serlo y norton ordenó de mala gana la segunda y quizá definitiva evacuación de rama sin embargo no tenían intención de irse hasta que los hechos no le dejarán otra opción cuando completó su maniobra de freno el indeseable visitante de mercurio se hallaba solo a cincuenta kilómetros de rama y al parecer estaba haciendo un reconocimiento completo con sus cámaras de televisión estas eran claramente visibles un adelante y otra atrás así como varias pequeñas son ni antenas y un gigantesco plató direccional dirigido a la estrella distante de mercurio norton se preguntó qué instrucciones llegaban desde ese rayo de luz y qué información devolvía no obstante los mercury llanos no podían enterarse de otra cosa que lo ya sabido todo lo descubierto por el endeavour había sido divulgado a través del sistema solar aquel vehículo espacial que había superado todos los récords de velocidad para llegar allí podía ser sólo una extensión de la voluntad de sus amos un instrumento de su propósito ese propósito pronto se conocería ya que dentro de tres horas el embajador de mercurio ante los planetas unidos hablaría en la asamblea general