'Victoria' de Paloma Sánchez Garnica 4b4525

Entre libros andan las ondas para contarte un millón de historias.

Te cuento un cuento con Alejandra Esteban.

Alto Jalón Radio.

Yo tengo un libro que vuela.

Hola, hola, aquí estamos de nuevo con una escritora que acaba de ser la ganadora del Premio Planeta 2024.

Se llama Paloma Sánchez Garnica.

Ya sabes que a mí no me gusta mucho traer premios literarios de ningún tipo a nuestro espacio, porque creo que nuestro hueco es otro espacio diferente, otra manera diferente de ver la literatura, pero en esta ocasión lo he traído por dos razones muy especiales.

Una, porque a mí Paloma Sánchez Garnica me encanta y me da igual que haya ganado el premio o que no lo haya ganado.

Y la segunda razón es porque este libro del que hoy vamos a hablar, que se llama Victoria, trae un tema de muy reciente actualidad y es la división de la sociedad en dos huecos.

Hace un momento hablaba con Fran y hablábamos de los buenos y de los malos.

Y en este libro de Victoria los buenos son muy buenos y los malos son muy malos.

Y, sobre todo, es un recordatorio de que la historia siempre vuelve, eso de que la historia es cíclica y que cada vez que es tiempo se repiten determinados acontecimientos es cada vez más cierto.

Yo cuando estudiaba Historia creía que no era así, que nos íbamos a volver a la guerra de los siglos XVII, XVIII y XIX, y ahora, en pleno siglo XXI, cuando creía que iba a haber taxis sobrevolando los cielos, llevando pasajeros de un lugar a otro, pues me encuentro con una guerra fría de la que participé este libro del que hoy vamos a hablar.

La autora, lo que os he comentado, Paloma Sánchez Garnica, es una madrileña del año 1962, es licenciada en Derecho a Historia y Geografía y eso es muy importante porque sabe muy bien de lo que habla, cómo lo quiere contar y qué personajes quiere que intervengan en sus novelas.

Entre otras muchas obras, a mí me encantan las dos últimas, que es La sospecha de Sofía, que es un thriller maravilloso, y Últimos días en Berlín, que no es una continuación, pero sí sigue la escena de ese Berlín que a ella tanto le adora, tanto le gusta, tanto le apasiona y que también es el protagonista, de alguna manera secundario, pero yo diría casi principal, de esta novela nuestra, Victoria.

Victoria le llevó a conseguir el Premio Planeta 2024, que ya sabéis que es uno de los galardones más destacados de la narrativa contemporánea española.

Ella no define su obra como una obra histórica, en el sentido estricto, porque ella, al ser licenciada, sabe muy bien de lo que habla, pero sí que utiliza mucho el argumento de la posguerra y los inicios de la Guerra Fría, como marco para una trama que es muy humana, una trama que está marcada por el sacrificio, yo también diría que por el resentimiento y, sobre todo, por la búsqueda de la redención, de esa búsqueda de la justicia divina en la tierra.

Para ello tenemos que contextualizar el argumento del libro, el centro de esta historia es una mujer, Victoria, una mujer pragmática, resiliente, como se dice ahora, fuerte, que lucha por proteger a su familia, en un mundo que está lleno, sobre todo, de muchos dilemas éticos y mucha tensión política.

Al lado de Victoria está su hermana Rebeca, su hermana Rebeca es una mujer con grandes ideales políticos, con todo lo bueno y todo lo malo que eso conlleva.

Ella prioriza sus convenciones y sus convicciones sobre las necesidades más inmediatas, es decir, ella antepone la política, sus pensamientos, a la realidad que están viviendo esas dos hermanas en el Berlín de la posguerra.

Y luego hay un tercer personaje muy importante, que es Hedy.

Hedy es la hija de Victoria, que siempre está la pobre atrapada entre dos mundos, entre los conflictos de su madre, los conflictos que ya habéis oído a lo largo del libro que son muy importantes, y su tía.

Ella es el reflejo, yo pienso, de cómo las decisiones de todos los que te rodean cambian el ritmo y el hilo de tu vida, el hilo argumental.

Dicen que estamos unidos por un hilo rojo con determinadas personas en diferentes lugares del mundo y Hedy es el fiel reflejo de que así es.

También hay muchos personajes masculinos en esta novela, pero yo no me quiero quedar con los malos en el día de hoy, me voy a quedar con el bueno.

Para mí el bueno es un abogado estadounidense que se llama Norton.

Y Norton tiene una relación muy bonita con Victoria, que es la parte emocional de esta novela.

No es una novela histórica al uso por eso, porque hay una parte romántica muy importante, hay una parte de costumbrista muy importante.

Y entonces Norton nos pone antecedentes de cómo es su país, ese país que Victoria tiene tan idealizado.

La novela, como os había dicho al principio, se contextualiza nada más terminar la Segunda Guerra Mundial.

Hay un Berlín que está arrasado, un Berlín que parece que no tiene futuro y Victoria sobrevive cantando en un barrio.