UHEP #1111 - AEW y cómo construir un buen PPV 392u1n

¡Buenos días, buenas tardes, buenas noches! Bienvenidos, yo soy Alejandro Gómez, hoy es 22 de mayo del año 2025 y este es el episodio 1111 de Último Hombre en Pie, un podcast de lucha libre. La realidad es que Ole Littlesingh está haciendo las cosas muy bien recientemente, especialmente en esta construcción de cara a Double or Nothing. Me parece que ha hecho click con muchos de los aspectos que parecía que eran imposible que hiciesen click y con otros que verdaderamente a mí me sorprenden.

Sí que es cierto que hay historias que a mí no me gustan, que a mí no me convencen, pero la realidad es que Ole Littlesingh ha funcionado muy bien de cara a este Double or Nothing y de hecho me parece un go-home show, el de anoche, que es muy potente. Es muy potente porque es un show que verdaderamente te deja con ganas de Double or Nothing. Te apetece mucho ver el show del domingo gracias a lo que ves anoche y la realidad es que de eso se trata, al final, ¿verdad? De eso se trata, de que realmente tú tengas el hype, después de ver millones de shows en millones de sitios, de ver algo en concreto.

Y me pasa con una promo inicial extraordinaria de Hangman Page y de Will Osprey, especialmente un Will Osprey al que se le achacó en su día que, bueno, sí, puede ser un gran luchador, puede hacer mil cosas, pero luego no tiene sentido narrativo o realmente no cuenta una historia o quizá no tiene presencia en el micro. Bueno, todo eso era mentira. Cuando Triple H salió a hablar de Will Osprey, salió a hablar diciendo que, bueno, sí, era el luchador más que había pasado por ahí.

No es verdad. Will Osprey no es un luchador más y creo que es evidente a estas alturas que es un luchador que efectivamente marca la diferencia. Y se nota. Se nota cuando coge un micro, se nota cuando suena la campana, se nota cuando le dan victorias y derrotas, se nota a nivel historias y lo que cuenta. Se nota perfectamente que está destinado a ser una megaestrella.

Lo que decía Triple H en su día, sin que nosotros lo escuchásemos de su voz, era que estaba ciertamente resentido por no haber podido firmar a Will Osprey, que tomó la decisión que creyó mejor. Ya veremos si eso es positivo o no para su carrera. De momento, desde luego que sí, porque está a un paso de ser retador al título de Jon Moxley y está a dos pasos de convertirse en campeón mundial de All Elite.

Y luego, en el otro lado tienes a Hangman Page y la verdad es que la interacción es brutal, porque es una interacción de amigos, es una interacción de amistad, es una interacción de la vida. Y a mí, ya sabéis que con Hangman Page yo tengo cierta debilidad, porque creo que es un personaje que tiene tantas capas, que tiene tantas aristas, que es tan como la vida misma.

Es una persona como tú o como yo, mundano, que te encuentras por la calle y que ves pasar y en su anonimato no sabes ni qué problemas tiene, ni qué ha tenido que sufrir, ni en qué momento está de su vida, no sabes nada. Pero cuando te empieza a explicarte, abruma, te atrapa. Y con Hangman Page me pasa eso. Y no tenemos un combate a muerte. No tenemos una rivalidad como la de Hangman Page contra Swerve Strickland, que verdaderamente querían atornillarse al suelo el uno al otro. No. Es una rivalidad de respeto, es una rivalidad de amistad, es una rivalidad que es muy real.

Y Will Osprey dice, si yo no gano me alegraré de que ganes tú. Pero amigo, yo tengo que ganar. Yo tengo que hacerlo y voy a pasar por encima de lo que haga falta para vencer. Le pregunta al inicio, oye, ¿sigues bebiendo? Enfatizando evidentemente ese ciclo de la vida de Hangman Page, ese ciclo a veces doloroso de la vida en el que tienes que pasar por momentos muy bajos para crecer de nuevo. Y Hangman Page está casi estoico. Y es un momento de decir, guau, es que no sé qué va a pasar.

Es que no sé por quién se van a decantar, es que no tengo ni idea de quién va a ganar y cualquiera de los dos sería perfectamente válido. ¿Dónde queda el otro cuando el uno gane? Bueno, pues esa es la gran incógnita, ¿verdad? Y esa es la incógnita que te pone Olly Lee Dresden para que verdaderamente vayas y veas Double or Nothing. Y eso yo creo que no se puede comprar con otras cosas. Esto te tiene que salir de forma orgánica. Y cuando tienes promos tan pasionales, tan personales, te llegan verdaderamente.

Son los momentos en los que los luchadores conectan con el público y este fue uno de ellos.