T02/Ep.05 Sonambulismo: Entre el sueño, el misterio y lo sobrenatural 6x11p

En el velo de la medianoche cuatro amigos se reúnen en torno a una mesa para explorar los
secretos más profundos y los misterios más intrigantes. Bienvenidos a Ingenuos del Misterio,
un podcast enigmático donde nuestras conversaciones despiertan la curiosidad y
destapan nuestras reflexiones más locas. No somos expertos ni lo queremos ser,
pero aseguramos una experiencia que te sumergirá en un mundo de incógnitas y te invitará a
descubrir los misterios ocultos de la noche. ¿Estás preparado para adentrarte en nuestra
tertulia y explorar lo desconocido? Entonces ponte los auriculares, siéntate en esta mesa,
cierra los ojos y déjate llevar por la oscuridad de la medianoche.
Lo que parecía una noche tranquila en el campamento se transformó en algo inesperado.
Cuéntanos, ¿qué ocurrió? Pues todo estaba bien, hasta esa última noche. No sé qué pasó,
pero entré en un brote de sonambulismo. Según mis amigas, me levanté, dio vueltas por la
habitación como buscando algo, pero yo no reaccionaba, no escuchaba nada. Ellas me
llamaban, asustadas, pero yo seguía dormida. De repente, me metí en una cama que no era la
mía. Cuando desperté, estaba perdida, confundida, no entendía nada. Esa sensación de no tener
control fue aterradora. Pasos en la oscuridad, miedo y preguntas sin respuesta. Algunas noches
nunca se olvidan. Verde que te quiero verde. Verde viento, verde ramas. Verde, una palabra
que al pronunciarla se disuelve en el aire. Verde como el alma que se pierde en la noche,
como el deseo que nunca alcanza su meta. Una palabra que no sabemos si se puede tocar o si
se escurre, como un sueño, como el sonámbulo que camina sin saber que camina, guiado por algo que
no puede ver. El sonámbulo avanza en la oscuridad sin conciencia, sin control, camina sin saber que
lo hace. Y en su caminar nos surge la pregunta, ¿qué hay en la oscuridad que lo mueve, qué fuerza
invisible lo arrastra? Hay algo inquietante en ese caminar, algo que nos conecta con lo que no
vemos, con lo que está fuera de nuestro alcance. Y aquí, entre las sombras del sonámbulo, aparece
la poesía de Lorca. La poesía que nos responde, pero que nos atraviesa. Verde que te quiero verde.
Una imagen que no se toca, que se escapa, pero que nos persigue. Lorca, el poeta de las sombras,
el poeta que supo tocar lo que no se ve, lo que no se puede entender. Verde que te quiero verde.
Como un canto lejano, como un grito en la noche, esa imagen de lo inalcanzable, de lo que nunca
logramos alcanzar, pero que sentimos que está ahí, a un paso en las sombras que nos rodean,
como el sonámbulo que avanza pero no sabe por qué. Lorca lo sabía, en sus versos hay algo que
se escurre entre las manos, algo que nunca podemos entender completamente, pero que nos marca. El
sonámbulo no sabe que camina, no sabe lo que mueve, y en esa incertidumbre, en ese misterio,
está el enigma. Hay algo que nos guía, que nos vemos, pero que sentimos, y cuando hablamos de la
oscuridad, de lo irreal, tal vez estemos hablando de eso, de lo que no vemos, pero que nos arrastra,
como el sonámbulo sin saber adónde va. Buenas noches a todos y ser bienvenidos a un programa
más en la sobremesa de Ingenuos del Misterio con Jacint, Jesús, Guille y yo, Xavi. Chicos,
¿qué tal la semana? ¿Habéis tenido tiempo para desconectar o el misterio os ha seguido incluso
en los sueños? Pues hemos estado a tope estas semanas, ¿eh? Sí. Preparando un montón de
cosas y con el misterio a nuestro lado, como siempre.