PT83 "Palestina des de dins" Palestina desde dentro con Cristina Mas Andreu 76b25

¿Qué pasa, Cristina? ¿Cómo estamos? ¿Qué tal, Artur? Pues, mira, aquí tratando de sostener este mundo cada día más oscuro.

Segundo check, ¿eh? Porque no sé qué me pasa siempre que grabo contigo, que esta grabadora decide fallar.

Será que es una grabadora sionista.

Tendré que descubrir si Tascam es una empresa sionista.

Esperemos que no.

Pues, nada, te hemos invitado, Cristina, más porque presentas tu libro, Palestina desde Adins, Palestina desde dentro, de la editorial Ara y Libras.

Y me has dicho que la colección era Ara Pausa.

Exacto.

Es un libro en el que un poco cuentas cómo se ha fraguado, un poco das contexto al genocidio que estamos viviendo hoy en día sobre los palestinos y los palestinas, que es un poco lo que te decía antes, que a veces cuando a los pueblos les pasan estas cosas, tienes como las ganas de adjetivarles si son luchadoras, si son valientes.

Pero, bueno, ellos al final seguramente su gran lucha es que no necesiten tener ninguno de estos adjetivos, ¿no? Sí, un poco esta idea de no queremos ser ni héroes ni víctimas, ¿no? Queremos tener nuestra vida normal como en otros lugares del planeta.

Cuando me propusieron escribir el libro lo estuve dudando mucho porque, bueno, yo soy periodista, no soy escritora, y tenía dudas, pero enseguida me di cuenta de que, bueno, era algo que podía hacer, de las pocas cosas que podía hacer en este contexto de genocidio acelerado.

Para mí era muy frustrante estar en una reacción de Barcelona y no poder ir a Gaza a hacer mi trabajo.

El Estado de Israel ha bloqueado absolutamente el de la prensa internacional independiente a Gaza para silenciar este genocidio.

Y a la vez me daba cuenta de que la gente estaba haciendo muchas preguntas, ¿no? ¿De dónde viene todo esto? ¿Cuál es la naturaleza del Estado de Israel? ¿Cómo hemos llevado hasta aquí? Y todas estas respuestas no me cabían en los artículos del día a día en ARA y entonces pensé que, bueno, era una buena idea tratar de hacer un libro cortito, ameno, fácil de leer porque hay un montón de manuales de historia de Palestina, hay un trabajo académico absolutamente ingente, pero faltaban más herramientas un poco para llegar a la calle.

Y quería hacer un libro serio, riguroso, a la vez un libro periodístico que lo que hace es traer las voces de Palestina aquí.

Y por eso viajé casi dos meses a Palestina el otoño pasado para recoger más de 70 entrevistas, recoger un poco estas voces y tratar de ponerlas en contexto y dar respuesta a todas estas preguntas que se hacía la gente.

Más que dar respuesta, dar elementos a la gente para que construyan sus propias respuestas.

Entonces es un libro muy didáctico, muy ameno, lleno de historias personales que tratan de ilustrar esta historia de más de 100 años, porque esto no empezó el 7 de octubre del 23, sino esta historia de más de 100 años de ocupación y de resistencia.

Porque, claro, una de las cosas que tiene el colonialismo es que brilla con una luz muy brillante.

Y esta luz muy brillante, como todas las luces muy brillantes, crea sombras muy oscuras.

Pero estas sombras muy oscuras cuestan mucho de ver, en el sentido de que, yo qué sé, hace menos de un mes, en un podcast en catalán que se llama La Riota, que me gusta mucho, entrevistaron al expresidente de MAS, que cuando le pusieron sobre la mesa el tema de Israel, cambió su actitud de estar en un programa de comedia y se puso de una forma no muy democrática, no dialogar, sino simplemente a imponer una opinión.

Y, claro, tú acabas de hacer este libro en el contexto en el que estamos, que hay muchos poderes económicos y de muchas formas que no quieren que salga este libro, porque no quieren que se conozca la realidad de Palestina.

Básicamente, ahora ya no lo han podido evitar.

No hemos llegado tan lejos que yo digo que esto ha sido un poco la guerra de las caretas caídas, que se ha desenmascarado un poco esta realidad.

Precisamente, lo que trato de contar es que, al final, el proyecto del Estado de Israel, el proyecto del sionismo, encaja históricamente perfectamente en la Europa de finales del siglo XIX.