Programa 81: Cristina Rodríguez (Estilista y diseñadora de vestuario) 4x2w6k

Buenos días, amigas y amigos del Circo Independiente.

¿Qué tal estáis viviendo la víspera de Eurovisión? A ver, decidme la verdad.

¿Os gusta o no os gusta lo que habéis visto en las semifinales? ¿Sabéis qué? A mí no me gusta nada.

Me parece que el nivel este año es patético.

Digo patético.

No solo lo voy a ver mañana, lo veo porque trabajo en RTVE, pero os voy a decir una cosa.

Pues ya estáis oyendo en off la invitada que os voy a presentar.

Pero, bueno, os voy a decir una cosa.

A mí Melody, la canción, si me gusta, y viste el nivel, como nos ganamos este año, que el nivel es patético.

A mí me gustan San Marino y Melody.

Y el resto, mamma mía.

Bueno, pero os voy a decir otra cosa, que no me gusta nada de Eurovisión.

Bueno, sabéis perfectamente que si hubiera sido para mí, yo creo que la UR debería expulsar a Israel.

Evidentemente, como no podía ser de otra forma.

No lo van a hacer, porque sabéis que el patrocinador mayor del festival es una empresa que realmente tiene origen israelí.

Por lo tanto, nos olvidamos de que expulsen a Israel.

Pero luego, esta mamarrachada, que no se puedan llevar las banderas de Palestina, que no se pueda llevar la bandera arcoíris.

¿Pero qué es esto? No solo es cortar la libertad de expresión, es también cortar la libertad de creación, la creatividad de un festival que siempre ha sido espectacular por su creatividad.

Así que, repito, veré el festival de Eurovisión, como no, para apoyar a Melody.

Pero el resto, mamma mía.

Bueno, dicho lo cual, os presento ya mi invitada de hoy, que la quiero mucho.

Es una chica fantástica, Cristina Rodríguez, estilista, diseñadora de vestuario, nominada a siete premios Goya.

Goya, Goya.

Luego, responsable de los maravillosos trajes de Mazinger, de películas como Tres botas de Más, Explota, Explota, de la serie Elite, que a mí me ha fascinado, especialmente los vestuarios, y hablaremos de Elite también.

En fin, querida, bienvenida.

Gracias, muchas gracias.

Estaba oyendo y estaba pensando que si no pueden llevar banderas gays, se quedan sin público.

Vamos a ver, Eurovisión estaba muerta.

Y de repente, el mundo gay decidió que le interesaba Eurovisión.

Y entonces ha resurgido.

Entonces, yo creo que hay que ir y que vayan los señores, las señoras y los señores ahí, y los señoros, y que vayan a verlo.

Que vayan a verlo ahí, pero bien, con traje y sin banderas.

Claro, sí.

De luto, de luto, de luto.

Y que recen el rosario.

De luto, de luto, de luto.

El año que viene a la organización de UR, le proponemos que se abre el festival vestido todo de luto.

Y a ver qué pasa, y a ver quién va.

A ver quién va, que es muy fuerte.

Sobre todo es ridículo.

Yo creo que la gente se hace unas chorradas en la cabeza.

Es como si tú dices, no puedes ir a este festival si te gustan las rubias, o los rubios, o los pelirrojos, o la gente con pecas, o solo puedes ir si mides más de unos 75 o de unos 80, ¿no? Al final, ¿a ti qué te importa con quién te acuestas y con quién te levantas? Es que es tan ridículo.

Pero lo más importante, un festival que tú lo has dicho, ha renacido también por el público gay.

También no, perdona que te...

Por el público gay, sí, tiene razón, tiene razón.

¿A cuántos heterosexuales conocemos que ven Eurovisión? No conocemos, no nos engañemos.

Pocos.

Bueno, y si vas al Benidorm Fest, que tú habrás ido, y lo habrás visto, claro, y tu pueblo, que hemos estado juntos en tu pueblo, que donde te conocí, es que no hay público.

Yo estuve en la despedida hace unos días de Melody, que la saludamos todas, y había mil invitados de público, además de los expertos y bla, bla, bla, y prácticamente no había mujeres.

Y había poquísimas mujeres, eran todos gays.

Sí, sí, sí, sí, sí.

Pero bueno, no sé, si quieren meterse en estas chorradas, que ellos piensen que les interesa si que siga el Festival de Eurovisión o que no siga, por tus convicciones morales, ¿no? Pero así nos vamos por un buen camino.

Y te digo una cosa, llega un momento que la gente se canse.

Claro, claro.

Que se canse y que se canse.

Y yo creo que este año, pues vamos a ver cómo acaba.

Oye, ¿qué opinas de Melody? Pues a mí, Melody, me hace mucha gracia.

Estuve en Los Goya, no podías hablar en Los Goya, ella estaba ahí, cantando toda rata, una diva, una diva, y era, yo no puedo decir algo, puedo decir una frase.

Pues a mí me hace mucha gracia.