La Otra Frontera 04 - Magia en el Siglo XXI (Parte 2) 411c72

Somos voces que susurran el espacio cuerpos de luz que brillan en la oscuridad notas que vibran buscando armonía en un océano sin límites somos manos que buscan tocar la verdad que se oculta en un libro en una imagen o en un sólido tenemos a nuestro alcance un mundo de magia los sueños sensaciones infinitas que no podemos dejar escapar por el hecho de acercarnos a otra realidad diferente esa realidad que por instantes se abre y nos muestra retazos de nosotros mismos de otra esencia de otro ser distinto que vive en nuestro interior pero ese ser también somos nosotros somos el universo y el viento y el agua y los recuerdos y los anhelos todo forma parte de nosotros y el mejor camino para encontrarnos y ser lo que somos es compartir nuestras ilusiones y nuestras pequeñas verdades por eso desde aquí queremos comparte tir con todos vosotros lo que somos y lo que nos ilusiona bienvenidos a la otra frontera buenas noches bienvenidos a una nueva edición de la otra frontera hoy tenemos la esperada continuación de esa larguísima entrevista a juan verdera pero ahora más cosas también tendremos una muy especial sección de viajes nuria acompañado de diego cortijo gran viajero y amigo nos traerán un impresionante recorrido por egipto estaremos con vosotros como es habitual luis illana juan josé gago ricardo hernández y yo misma eden garrido comencemos con uno de los inquietantes relatos de luis illana esta noche y como peculiar homenaje al tema que estamos tratando en este programa louis nos cuenta una historia sobre el peligro que tiene recurrir a la magia para obtener poder el relato se llama ya te tengo aún hoy lo recuerdo con terror aquella expresión surgida de la nada del abismo fue un segundo fugaz el que tarde en destrozarlo todo pero ya era tarde las velas negras al caerse unas sobre otras alcanzaron cortinas y enseres la cabeza del gato desollado se resquebrajó bajo mi bota la mano cortada que le compré a que el sepulturero borracho voló por los aires quise cerrar la puerta quise volver atrás pero ya era demasiado tarde había visto sus ojos y ella había visto los míos leyó mis pensamientos en un segundo diría mejor que me lo sorbió como el que chupa el caparazón de un cangrejo fue entonces cuando por todos los medios aún abrazándome las manos intente llegar al pergamino el mismo que había firmado con mi sangre poco antes la rúbrica del pacto leyen en tantos