Mar de Hierba (1947) KATHARINE HEPBURN / SPENCER TRACY / ELIA KAZAN / Western / Cine Clásico 6n6s5s

Esta historia tiene lugar en su mayor parte ante el fondo del mar de hierba, ese inmenso reino que en otro tiempo cubría la parte occidental de Norteamérica, desde las grandes llanuras hasta las montañas rocosas y más allá.

Telegrama para la señorita.

No te apresas que llegamos tarde.

Está bien.

¿Es para mí? Para la señorita Luti.

Yo se lo subiré.

¿Está Luti en su cuarto? Todas están arriba, no sé cómo no se cansan de tantas pruebas.

¡Boda! ¡Qué alegría cuando se terminen! Apresúrate, Raquel.

¿Para qué? Aún faltan tres días.

Raquel, ¿te has casado alguna vez? Varias veces, para no perder el tiempo.

¿Dónde está Luti? Ahí dentro, probándose el vestido.

¿Y qué vestido? ¡Muy precioso! ¿Puedo pasar, Luti? Un momento, papá.

Abre, Raquel.

Estás preciosa.

Entonces sonríe.

¿Qué sonría? Desde que me prometí, no te disto a sonreír.

Piénsalo, Luti.

Las dos cosas más largas que hay en San Luis son tu cara y el río Mississippi.

Nada más deseo tu felicidad y solo tengo un pensamiento.

Que si Jim Bruton es alguien en Salford, territorio de Nueva México, tú eres alguien en San Luis.

Cállate, papá.

Seréis una pareja desigual tanto allá como aquí.

Yo sé que todo saldrá bien.

Además, un noviazgo tan corto y con un ganadero.

Bien, pero acuérdate de lo que me dijiste cuando nos presentaste.

Sí, tiene razón, te lo presenté yo.

Un telegrama para ti.

Gracias, probablemente es suyo.

Debe anunciarme que ha tomado el tren para venir.

No...

No puedo ir, San Luis.

Toma primer tren para casarnos aquí.

Tuyo es Jim.

Vaya.

Papá, esto no tiene gracia.

No me pedías que sonriera.

Has conseguido que el tren llegue con tres cuantos de hora de adelanto.

Y 33 segundos.

Tengo cronómetro.

Ya da usted si Sam no ha venido a esperarla.

No se preocupe.

Ya he oído que el tren ha llegado adelantado.

Tampoco ha llegado su novio.

No.

¡Sammy! ¡Sammy! Felina.

Hola, monigote.

Has crecido.

Está más alta, ¿verdad? Te presento a Luthi Cameron.

Hemos hecho gran amistad durante el viaje y me ha ayudado mucho.

Tanto gusto.

Su mujer me ha hablado mucho de usted, ¿sabe? No tanto como ella a mí de su novio.

A lo mejor lo conozco, agricultor.

Ganadero.

Se llama Jim Bruton.

¿El coronel Bruton? Sí.

Sí, le conozco.

Gracias por haber ayudado a mi mujer.

Vamos, Felina.

Ya voy, Sammy.

Adiós, Luthi.

Adiós, Felina.

Y buena suerte.

Hasta otro día.

Sé buena, chatita.

¿No hay aquí un hotel? Sí.

Allí enfrente lo tienes.

Gracias.

¿El coronel Bruton vendrá a buscarme?