LibertadVCF Radio 22 de Mayo 296z20

Culpan a la pandemia, excusan a las que quieran para cubrir sus miserias.

Despotas, gestionan unos seres que hace poco no sabían ni lo que era una pelota.

Quemamos ya la falla, desde Mestalla, todos a una voz los que no fallan.

Valencia, resiste, respira, que toda pesadilla algún día termina.

Libertad, Valencia, libertad, despertad valencianista, por nuestra reconquista, que un día volveremos a soñar.

Es hora de volver, Valencia.

O damos buena guerra, o estos nos entierran.

Saquemos las señeras, sonora nuestra tierra, por nuestra libertad, Valencia.

Queremos la libertad, Valencia, libertad, despertista, que un día volveremos a soñar.

Es hora de volver, Valencia.

Peter, dime, cuál es tu juego, matando nuestro escudo.

Tras la derrota del pasado domingo 0-1 ante el Athletic Club de Bilbao, el Valencia CF certificó que una temporada más su clasificación en la Liga Española será en la zona mériton, es decir, entre el décimo y el decimosegundo lugar, en la más absoluta intrascendencia.

Tras unas semanas donde la parroquia valencianista estaba entretenida buscando la bolita bajo el cublete de la competición europea, las matemáticas, tan insensibles como siempre, le han dejado claro a los trileros que los números ya no dan y no se puede estirar más la milonga.

Y mira que este año está barato entrar en Europa.

El séptimo y octavo clasificados de la Liga, con poco más de 50 puntos, van a disputar o bien la Europa League o la Conference League.

Pues ni por esas.

Nosotros a nuestra zona de confort, a la zona mériton.

Y lo más preocupante es que a Mestalla, a la vista de lo vivido en el último partido, le parece bien y está satisfecha con este triste peregrinar de su equipo.

En un ambiente festivo, más propio de un club exitoso que ha alcanzado sus objetivos, que de un club sin rumbo como es el nuestro, se vivieron escenas al menos llamativas y dignas de comentar.

En el minuto 19, el estadio apenas cantó el Peter vete ya, Peter vete ya, ni tan siquiera para mantener un mínimo de dignidad.

Enzo Quedate, Enzo Quedate, coreaba la grada en diferentes momentos, cuando lo cierto es que es un jugador cedido sobre el que ni tan siquiera existe una opción de compra, por lo que difícilmente el jugador puede tomar alguna decisión sobre su futuro como valencianista.

Y para acabar de rematar, al final del partido, la grada ovaciona al equipo.

Podemos entender que de forma merecida tras una segunda vuelta muy buena, pero se olvidó de la más mínima protesta contra los responsables de esta lamentable gestión.

Quizás sea momento de, para poder explicar la situación de abandono en la que se encuentra el Valencia Club de Fútbol, dejar de mirar a Peter Lin, o a Javier Solís, o a Imaculada Ibañez, o a María José Catalá, o a Borja San Juan, o a Papi Robles, y a un largo etcétera de infames protagonistas en el entorno valencianista y mirar más hacia nosotros.

Mirar hacia Libertad, VCF.

Mirar hacia el valencianista que va a Mestalla, y mirar hacia el valencianista que no va a Mestalla.

Porque llega un momento que para repartir responsabilidades ya no vale con echar la culpa a los demás.

Quizás, asumiendo que no hemos estado a la altura de la historia de nuestro club, podremos explicar cómo hemos llegado hasta aquí.

Y sobre todo, cómo se está manteniendo esta situación tan lesiva para el Valencia Club de Fútbol.

Quizás, preguntándonos cada uno de nosotros, los valencianistas de base, ¿cómo se está manteniendo?