LDD(R)- Victoria y Control en el Madrid ocupado 5d394a

Franco preside el desfile desde la tribuna central en uniforme militar de
diario, con camisa azul y boina roja, los símbolos de las tres fuerzas de cuya
unión ha surgido el movimiento. Le acompañan los del gobierno,
autoridades militares, el cardenal primado y el gran visir de Marruecos.
Junto a las banderas españolas, de Falange, del Requeté, ondean las de Alemania,
Italia y Portugal, los países amigos. Franco decide que en esta ocasión se le
imponga solemnemente la más alta condecoración militar al valor, la Gran
Cruz Laureada de San Fernando. Tras la lectura del decreto que hace Gómez
Jordana, se la impone el general Varela. La multitud, brazo en alto, grita
Franco, Franco, Franco. Las tropas franquistas no sólo ganaron la guerra
con la derrota del ejército republicano, necesitaron desarrollar un
control efectivo del territorio y la población. La victoria se impuso en el
campo de batalla, pero también se construyó día a día, por medio de la
implantación de una túpida red formada por jueces, militares, policías, terror y
delación. Calle a calle, portal a portal, esta maquinaria de control peinó la
ciudad de Madrid, con el propósito de detener, encarcelar y ejecutar a los
rebeldes, aislar a sus afines y castigar a quienes les protegían.
Tenemos al otro lado del teléfono al historiador Alejandro Pérez Olivares,
autor de Victoria y Control en el Madrid ocupado, los de la Europa 1939-1946,
recientemente publicado por Traficantes de Sueños. Alejandro, bienvenido a la
cita en la de Diógenes. Muchas gracias.
El libro recorre un proceso específico relacionado con el que fuera Cineuropa,
considerando que a lo largo del libro realizas una especie de cartografía, de
geografía de la represión en un ámbito urbano concreto. Quizás debamos empezar
por visualizar esas calles, esos edificios y su entramado social. ¿Cómo
eran esos barrios protagonistas de tu libro y qué se podía encontrar ahí en
los años de república y durante la guerra?
Bueno, efectivamente en el libro hay una parte importante de análisis a través del
espacio urbano, de las calles. Comienza, no es casual, comienza con un
plano. Tiene un objetivo y es un poco situar el texto, situar la propia historia
en el contexto en el que se produjo. Entonces, el libro se llama
Los de la Europa, hace referencia a una antigua sala de cine que protagonizaba
la vida política en un barrio de Madrid, en Tetuán.
Y hay que decir que en ese cine hubo mítines, hubo congresos de
partido, en ese cine hablaron líderes políticos sindicales de la talla de
Drago Caballero, de Cipriano Mera, incluso el propio
José Antonio Primo de Rivera habló en el cine Europa.
Y hay que entender el cine Europa como un centro, como un altavoz verdaderamente de
la vida política en el Madrid de los 30. Pero sin olvidar que en el barrio había
una serie de centros de referencias para el anarquismo. Es un barrio
completamente protagonizado políticamente o a nivel de militancia
por el anarquismo. E incluso se puede decir que Tetuán era el centro de
anarquismo madrileño. Ateneos, Libertarios, otras sedes de la propia
organización, pues estaban radicados ahí en Tetuán. Entonces hay que
entender el cine Europa como un centro importante, sobre todo a partir de la
guerra, pero hay que entender también en relación con otros con otros centros
políticos. De alguna forma estamos hablando, entiendo, de barrios donde se
establecieran diferentes redes de sociabilidad dentro del obrerismo de la
época. Se entiende desde este lugar que fuera un objetivo,
donde se pusiera la mira en las autoridades.