"La liga de los pelirrojos" de Arthur Conan Doyle (parte 2 de 2) |Audiolibro 6v402j

Estás escuchando una audiolibros del canal sara narraciones también disponible en otras plataformas viajamos en el metro está al darse y una corta caminata nos que bodas como una escuela escenarios de la singular historia que habíamos escuchado por la mañana era una plácida insignificante pobre pero de aspecto ciclo con cuatro hileras de desventaja las casas de ladrillo de dos pisos rodeando un jardín vallado donde un montón de hierbas sin cuidar y unas pocas mataste laurel ajados mantenía una dura lucha contra la atmósfera hostil y cargada de humo en la esquina de una casa tres bolas dorada y un rótulo marrón con las palabras llave wilson en letras de oro denunciaban el local donde nuestro pelo rojo cliente tenía su negocio serlo johns se detuvo ante la casa con la cabeza la década y la examinó atentamente ojos brillando le bajó los párpados producidos a continuación camino despacio calle arriba y calle abajo sin dejar de examinar las casas por último regreso frente al atiende del prestamista después de dar dos o tres fuertes golpes en el suelo con el bastón se acercó la puerta y llamo abrió al instante un caballero con cara de listo y bien afectado que le invito a entrar gracias dijo hoy solo queria preguntar por donde sepa desde aquí al strange la tercera la derecha y la cuarta a la izquierda respondió sin vacilar el empleado cerrando a continuación la puerta un tipo lista comentó hoy mientras que nos alejamos en mi opinión es el cuarto hombre más inteligentes de londres y en cuenta audacia creo que podría aspirar al tercer puesto he tenido noticias suyas anteriormente es evidente dije yo que el empleado del señor wilson desempeña un importante papel en este misterio de la liga de los rojos estoy seguro de que usted le ha preguntado el camino solo para poder echarle un vistazo el entonces saque rodilleras de sus pantalones lo que esperaba ver para que golpeó el pavimento mi querido doctor lo que hay que hacer ahora es observar no hablar somos espías en territorio enemigo ya sabemos algo de sachs como el esfuerzo exploremos ahora las calles que hay detrás la calle ya que nos metimos al dar la vuelta de la esquina de la recónditas ex como escuela presenta para con esta tanto contraste como el derecho de un cuadro con el revés se trataba de una de las principales arterias por donde discurre de tráfico de la city hacia el norte y hacia el oeste la calzada estaba bloqueada por el inmenso río de tráfico comercial que fluía en ambas direcciones y las aceras no te pongas gasto al presuroso enjambre de peatones contemplar la hilera de tiendas elegantes y oficinas lujosas nadie habría pensado que su parte trasera estaba pegada a la de la solitaria y descolorida plaza que acabamos de abandonar veamos dijo parando es en la esquina y mirando la hilera de edificios me gustaría recordar el orden de las casas una de mis aficiones es conocer londres al detalle aquí esta martín la tienda de tabacos la atiende cita de periódicos la sucursal de cobre del sitio suburban bank restaurante vegetariano y las cocheras mac con esta llegaremos a la siguiente manzana y ahora doctor nuestro trabajo está hecho ella es hora de que tengamos algo de inversión un bocadillo una taza de café y derechos a la tierra del violín donde todo es dulzura delicadeza y armonía y donde no hay clientes rojos que nos fastidien con sus rompecabezas mi amigo era un entusiasta de la música no sólo un intérprete muy dotado sino también un compositor de méritos fuera de lo común se pasó toda la velada sentado en su butaca