Excomulgando Videojuegos 5963a

Hermanos, nos hemos reunido hoy aquí. Hermanos, nos hemos venido para hablar de...

¡Eucaricto! ¡Eucaricto! ¡Callaos un poquito ya! ¡Callaos! ¡Tú, bobo! ¡Cállate, bobo! ¡Bobo! ¡Eres un bobo! Muy bien, gracias, paisano.

Como decía, íbamos viniendo aquí para...

¡Vamos, callados, que os pongo una torta! Pero, pero... ¿Qué es este ultraje? ¿Qué está pasando aquí? Padre, una pregunta que yo tengo.

Cuéntame, hermano Jesús.

¿Las putas cuándo vienen? Joder, tío, qué ganas tenía de este programa. Muy buenas, Jesús.

¿Qué tal? ¿Cómo estamos? Bienvenidos todos a un nuevo programa de Excomulgando Videojuegos.

Vuestro podcast de confianza satánico y cada día el de más infieles.

Dios santo, tenía muchas ganas, tío. La semana pasada hicimos ahí ese de amor y de cosas bonitas.

Bueno, amor. Amor poquito.

Amor el que le va a dar ese cura ahora mismo.

Vamos, lo tengo fresquito porque realmente lo acabamos de grabar hace 20 minutos.

Literalmente. Bueno, creo que te has pasado. Creo que hace 10.

Hace 10 minutos que hemos terminado de grabar el programa de la semana pasada, pero eso es lo bonito del podcasting, que podéis viajar en el tiempo todo lo que queráis.

Claro que sí, como Doraemon. Vamos a ver. Ese sí que es satánico, eh.

Hostia, ese...

Guau, chaval, tío. Madre mía, ya ves tú. Doraemon entra en una ferretería y se pone cachondo.

Hostia, le ponen los tornillos como si fuera, yo qué sé.

Bueno, antes de nada, Javi, quiero darle las gracias, como ya dijimos en el programa de la semana pasada, muchísimas gracias a Tonimi, porque Tonimi entre frote y frote siempre da buenas ideas y aquí estamos nosotros haciendo realidad ese programa que dijiste que querías que hiciésemos y aquí lo tienes para que lo disfrutes tú y tu polla enjabonada.

Así que bueno, espero que lo disfrutes, que te lo pases bien y hablaremos enseguida.

En verdad lo hemos hecho bien, tío, porque nos hemos grabado el de San Valentín antes de las 12 y ahora que hemos empezado con el programa guapo ya me podía abrir un botellín.

Hostia, tienes terrorazo, tío.

Sí, señor.

¡Hala! ¡Escomulgado! ¡Déjala, déjala, déjala, que quiero escucharla! Bueno, vamos a ver, vamos a ver.

De qué va este programa.

Poco se habla de lo que salió, que estaba novita, ¿eh? Hombre, estaba más salido, tenía unas ganas de darle… De rincarse la Shizuka, que flipas.

Sí, sí, madre mía.

Le voy a poner mirando pa' cuenca y no sabe ni dónde está en el mapa.

Le iba a querer hacer el arigato.

Bueno, vamos a ver, vamos a ver.

Este programa, Escomulgados Videojuegos, realmente hemos hecho un mix de ideas.

Hemos hablado, vamos a hablar, mejor dicho, de cosas satánicas, de videojuegos que tienen demonios, de videojuegos que tienen tal, otros videojuegos que tienen sectas, más y más sectarios y, bueno, juegos así, en general, también con alguna temática así un poquito más de terror, ¿no? O sea que tenemos un poquito de todo.

Sí, la verdad es que sí, porque la verdad es que podemos encontrarnos una enorme cantidad de videojuegos que, aunque realmente no tiene una índole, no tiene una temática de terror ni nada por decirlo, pero sí que tiene elementos mal rolleros que queremos explotar en este programa, porque nosotros somos muy amantes de la explotación, las cosas como son.

Y ahora vosotros vais a decir que no y lleváis zapatillas made in China, ande que os jodan.

Pero sí, porque podemos encontrarnos muchísimos videojuegos, que ahora hablaremos sobre ellos, que realmente no tienen ni por qué ser mal rolleros, pero pueden tener temáticas que, en algún momento determinado, nos dé un poquito de miedo.