Entrevista a KAMILA FERREIRA, superviviente de la trata y la prostitución 6p355o

Amigas, oyentas, escuchariados en general, soy Barbie Japuta.

Lo que vas a escuchar a continuación es la entrevista completa a Camila Ferreira, de la que pudiste escuchar un extracto en nuestro podcast Radio Japuta 242.

Camila Ferreira es superviviente del sistema prostitucional.

Es brasileña, pero el título de su libro nos da una idea de en qué país vivimos nosotras, las españolas.

España, Tailandia, Europea, las cloacas de la prostitución.

Hoy nos visita para contarnos su propia historia, desde una infancia marcada por la pobreza, la violencia y el abuso en Brasil, hasta su explotación en redes de prostitución en varios países y su llegada a España.

Bienvenida a Radio Japuta, Camila, ¿cómo estás? Bien, bien, estoy muy bien, gracias a Dios.

Me alegro.

Camila, ¿cómo es tu infancia en Brasil? Quería empezar por tu infancia, porque creo que marca el resto de tu historia.

¿Cómo es tu infancia en Brasil, viviendo con una familia a la que, cuando eres adulta, acabas catalogando de familia proxeneta? Mi infancia, mi familia en concreto, es una familia, hasta el día de hoy, una familia completamente violenta.

Yo nunca he recibido amor de ningún miembro de mi familia.

Siempre he sido la niña de los recados, la niñera de primos y hermanos pequeños y la criada de toda la familia.

Nunca he recibido amor por parte de ninguno de ellos y mucho menos agradecimiento por absolutamente nada.

¿Tienes más hermanos y hermanas? Sí.

¿Y solo tú tienes este papel en la familia, de recadera, de chacha? En aquella época, sí, porque de las hembras yo era la mayor.

Y, al día de hoy, las mujeres de mi familia siguen siendo criadas y los hombres de mi familia, al punto de coger un vaso de agua y entregarles en la mano, hacerles el plato de comida y entregarles en la mano, quitarles el zapato, ponerles las chanclas.

Es una creación total de servidumbre, pero ese papel de servidumbre solo tiene las mujeres de la familia.

Vives en las favelas de Sao Paulo. ¿Cómo es la vida allí? Las favelas de Brasil, como mucha gente ya ha escuchado, lo que se oye y lo que se ve en las películas no es un mito.

Es una dura y cruel realidad.

En la favela donde fui nacida y criada, no se puede entrar la policía local, la policía civil, la policía normal.

Ahí solo entra la policía de élite o el ejército brasileño.

Es una zona muy peligrosa.

Totalmente peligrosa.

Por ejemplo, tú vas a la favela donde fui nacida y criada, si tú estás sola, tú no entras.

Tú solo entras si tú fuiste conocido, familiar de algún morador de la favela.

¿Y para ti cómo es vivir allí? Además, como decías, en ese estado de servidumbre total a los hombres de tu familia.

Un sitio peligroso, un sitio de cero oportunidades, un sitio, además, muy pobre.

¿Cómo es tu infancia allí? De mucha miseria, mucha pobreza, falta de oportunidades.

Las personas que, mucho más en aquella época, las personas de la favela, eran personas completamente olvidadas por el gobierno brasileño.

¿Y por qué dices que tu familia es una familia proseneta? Mira, imagínate que yo con apenas 14 años, inconscientemente, yo empecé a ser proveedora.

Entonces, una familia donde todos están esperando que tú pagues la agua, que tú pagues la luz, que tú hagas la compra, que tú pagues al médico para el primo, el hermano que se pone enfermo, el tío o hasta el vecino de toda la vida.

O sea, desde mis 14 años, yo empecé a solucionar el problema.

Era como si yo fuera padre proveedor, como si yo fuera el proveedor de todos.

Y yo tenía que solucionar todos los problemas económicos y hacerme creer que, por ser de mi familia o hasta mi vecino de toda la vida, que era una obligación.

Y, además, con el tema religioso, porque ustedes saben que, como Brasil es un país, el 80% del país es cristiano, entonces, también con el tema de la religión, si tú no ayudas a tus hermanos, si tú no te ocupas de tus tíos, de tus tías, de tus primos, Dios te va a castigar y te vas para el infierno.