Dirección financiera - Productos de financiación de inversiones 245q1w

Hola a todos y bienvenidos a un nuevo episodio del podcast de Dirección Financiera del MBA Online. Hoy vamos a hablar sobre los productos de financiación de inversiones como pueden ser vehículos, maquinaria y muebles que solicitan los clientes que pueden ser tanto particulares como profesionales o empresas. Vamos a analizar los diferentes productos indicando sus ventajas, sus inconvenientes y su funcionamiento así que ponte cómodo y prepárate para conocer lo más importante de estos productos financieros. Si vamos a hablar de instrumentos de financiación de inversiones hay que centrarse en los más habituales que son el préstamo, el leasing y el renting. De estos tres el renting es el más diferente porque como veremos más adelante el renting en sentido estricto no es un producto de financiación es un alquiler con unos servicios pero todas las entidades financieras nos lo ofrecen como una alternativa más al préstamo o al leasing que sí que son en sentido estricto instrumentos de financiación.

Empecemos con el préstamo bancario, hablamos de préstamo bancario porque el prestamista es una entidad bancaria que entrega una determinada cantidad a su cliente para que éste se lo devuelva con unos intereses en función de las condiciones que se hayan pactado. Desde el punto de vista financiero estas condiciones son por una parte el importe del préstamo, por otra parte la duración y más concretamente el número de pagos en los que vamos a devolver la deuda, el tipo de interés que puede ser fijo o puede ser variable y lo que se denomina el sistema de amortización esto es cómo se va a devolver la deuda y en consecuencia cómo se van a cuantificar los pagos que el cliente tiene que hacer para la devolución de la misma.

En este sentido hay una devolución única esto es la deuda se devuelve de una sola vez al final esto es poco habitual y lo más habitual es una devolución fraccionada que en este caso el cliente va a ir devolviendo la deuda poco a poco y además va a ir pagando también periódicamente los intereses que la deuda vaya generando y dentro de este sistema de amortización fraccionada el más habitual es el que en España se conoce como sistema francés, luego hablaremos de él.

Otra cosa importante es que cuando nosotros pedimos un préstamo tenemos que saber qué costes conlleva la formalización de esta operación, en este sentido lo podemos agrupar en cuatro apartados la comisión de apertura y o estudio que se soporta al principio, los gastos de formalización que también van al principio como pueden ser una tasación, algún tipo de gastos que nos obligue el banco y luego también hay unos gastos periódicos como puede ser por ejemplo el gasto de mantenimiento de la cuenta a la que va vinculado el préstamo o incluso algún seguro que el banco me obligue a firmar por el hecho de haber contratado el préstamo, pero sin lugar a dudas el coste más importante de un préstamo sobre todo en el largo plazo es el tipo de interés que el cliente va a soportar por la financiación que el banco le está prestando y este tipo de interés puede ser fijo, es decir el mismo porcentaje durante toda la operación o puede ser variable, en este caso periódicamente la entidad revisa el tipo de interés de acuerdo con lo que se haya pactado en el contrato y a medida que se van produciendo estas revisiones cambia el tipo de interés y en consecuencia cambian las cuotas que el cliente va a pagar y también puede haber otro tipo de comisiones, la más habitual, la más conocida es la llamada comisión de cancelación parcial o total que es un porcentaje que se puede pactar si el cliente en un momento dado decide cancelar, amortizar o bien toda la deuda o bien parte de la deuda, en ese caso se le penaliza con un porcentaje sobre la cantidad cancelada.

Si estamos hablando de los gastos que conlleva el préstamo hay que mencionar el concepto de TAE, la tasa anual equivalente, hay que decir que la TAE es un concepto financiero que en España, solamente en España se conoce con estas siglas, con esta expresión y con las siglas TAE, tasa anual equivalente, pero que en otros países existe con otro nombre. De esta TAE hay que decir que aparece obligatoriamente en el contrato y también en las publicidades que las entidades financieras hacen de los préstamos, de los leasing, ¿por qué? porque la entidad reguladora de España, que es el Banco de España, obliga que así ocurra.

Hay que decir que la TAE tiene efectos meramente informativos de el coste que va a soportar el cliente a lo largo de la operación, en términos porcentuales, siempre la TAE viene expresada en términos porcentuales, por lo tanto con la TAE realmente tú no vas a poder saber cuántos euros vas a terminar pagando la operación porque esa no es su finalidad.