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Los Cazadores de Mamuts
Los Cazadores De Mamuts. Parte 2

Los Cazadores De Mamuts. Parte 2 3v6v28

8/2/2022 · 03:00:01
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Los Cazadores de Mamuts

Descripción de Los Cazadores De Mamuts. Parte 2 w4i6e

Los cazadores de mamuts es la tercera novela de la saga Los hijos de la tierra. El libro comienza cuando los personajes principales, una joven mujer llamada Ayla y un hombre llamado Jondalar, se encuentran con un grupo conocido como los mamutoi o cazadores de mamuts, con quienes deciden vivir durante varias estaciones. Los mamutoi no solo cazan mamuts para alimentarse, sino también para obtener pieles, marfil y materiales para construcción entre otras cosas. Además, lo que es más importante aún, lo honran y adoran espiritualmente. Ayla y Jondalar se quedan a vivir en el Campamento del León de los mamutoi, donde vive un buen número de respetados de ese pueblo. El sabio más grande entre los mamutoi es Mamut, el chamán más anciano y el líder de todos los mamutois, quien se convierte en el mentor de Ayla, además de colega en los campos del esoterismo y el pensamiento. Al observar la afinidad de Ayla con los caballos y los lobos (Ayla decide criar a un lobezno, al que llama «Lobo»), Mamut comienza a prepararla para que se convierta en una mamutoi. El libro se centra en la tensión creada por las relaciones entre los personajes para crear una historia, en la cual la incapacidad de Ayla para mentir, causada por haber sido criada entre personas esencialmente honestas, lleva a Jondalar, alguien más complicado, obstinado, pasional y con muchos prejuicios contra el clan, a cometer múltiples errores. El conflicto fundamental es un triángulo amoroso entre Jondalar, Ayla y Ranec, un miembro único del Campamento del León, ya que su padre realizó un largo viaje hacia el sur donde conoció a una mujer «tan negra como la noche», con quien tuvo un hijo mulato. Jondalar, movido por los celos, decide hacerse a un lado, y Ayla piensa que él no la ama. Tanto es así, que a punto estuvo de casarse con Ranec, hasta que, en el último momento, varias revelaciones vuelven a reunirla con su verdadero amor, Jondalar, que la recibe con los brazos abiertos. Al final, Ayla y Jondalar deciden emprender juntos el viaje de regreso hacia la tierra de los zelandonii, el pueblo de Jondalar. Como en todos sus libros, la autora, Auel, realiza una exhaustiva y detallada investigación arqueológica. Por ejemplo, las tiendas hechas con huesos de mamut que describe, así como algunas vestimentas, están basadas en hallazgos reales realizados en Ucrania. 1b2i34

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Con los ojos llenos de tristeza rival de nacimiento de belén se pudo la mano en el pecho no conocía la palabra a veces le cuesta respirar dijo energía problema no es aspirar problema es sangre no sangre no tu tumba dijo apretando un puño contra el pecho frustrada por su falta de vocabulario el corazón eso es lo que dice mamut que tiene débil del corazón como sabes y faena curandero mujer de media finas la mejor de clan ella enseña como hija y o de era la arabia dicho que hay la era mujer de medicina cordones la sorprendía enterarse de que los cabezas catas tuvieran alguna noción de medicina pero tampoco se sabía que pudieran a hablar y el o con le había hecho comprender que aún sin el don de la palabra no era un animal estúpido como tantos creían aunque hay la no fuera mamut bien podía saber algo de curar las dos mujeres levantaron la vista sobre ellas se había proyectado una sombra mandó a decir si puedes ir a hablar con él hay dijo danubio concentrada en san base en la conversación no habían visto al joven alto que se aproximaba diga que está muy entusiasmado con ese juego que le has enseñado continuo según dice la ti quiere preguntarte si me enseñara también a mi algunos signos sí sí yo enseña yo enseña a cualquiera yo también quiero aprender más palabras con las manos dijo en tanto se levantaban mañana preguntó baila si mañana por la mañana pero todavía no has comido nada tal vez será mejor que comamos salvo antes de conmigo y te buscaré algo para muy también tengo hambre dijo la también dio agregó la nube cuando no tienes hambre tu entre tú y talud creo que sería capaces de comiendo sumamente entero observó con los ojos llenos de orgullo al contemplar a su hijo tan alto y atractivo mientras las dos mujeres caminaba junto con dan lugar al albergue los demás al ver que a andar parecieron tomar su iniciativa como una señal para hacer una pausa y ir a comer todo se quitaron la ropa exterior para colgarla en las perchas del vestíbulo fue un almuerzo sin formalidades algunos cocinar un en sus propios hogares otros se reunieron en el primer hogar donde estaba el fuego principal y varios otros más pequeños hubo quienes comieron restos fríos de mamuts otros carne o pescado cocidos con raíces obertura en una sopa expresada con cereal silvestres tosca mente molidos arrancados de entre la hierba de la estepa de cualquier modo casi todos acabaron por trasladarse a la zona común mientras bebía en una infusión caliente antes de salir otra vez ahí la sentada junto a mamuts observado las actividades con mucho interés todavía la sorprendía el ruido que hacían al hablar y reír a un mismo tiempo pero comenzaba a acostumbrarse más aún le maravillo la desenvoltura con qué a las mujeres se movían entre los hombres no había y jerarquías estrictas ni orden alguno para cocinar y servir los alimentos todos parecían servir solos exceptuando los más pequeños que lo hacían con ayuda de los mayores fue a sentarse con cuidado en la esterilla de hierba extendida al lado de la isla tenían equilibrio entre las manos una taza flexible y se nasa tejida con endurecido con un diseño en colores contrastantes estaba llena de ti de menta que has levantado temprano preguntó a ella si no quise molestarte dos profundamente despierto cuando quiero alguien herido pero deje dice que vieja croacia siempre habla a gritos con breve gritaba tanto que hasta yo les hoy fuera dijo con dólar frente podrá ser un piano revista pero no se si echarle todas las culpas a él esa vieja más que un cuervo quien puede vivir con ella creo alguien herido insistió baila pensativa juan la miro intrigado no parecía que estuviera repitiendo su equivocada impresión del despertar tienes razón hay la dijo mamut hay viejas heridas que aún duelen deje lástima por frale hay la se volvió hacia mamut no tenía reparos en plantearle sus preguntas aunque en general no quería demostrar su ignorancia que es precio anunciar deje dijo tuya y pidió alto precio nupcial por ella mamut hizo una pausa antes de responder citando cuidadosamente sus pensamientos para que haya comprendiera hay la observaba con curiosidad su cabeza blanca podría darte una respuesta es sencilla pero no es tan fácil como parece hace muchos años que pienso en esto no es fácil comprender explicar cómo es uno mismo como es el propio pueblo ni siquiera cuando se es uno

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