
Descripción de 3x08 De Red y Green Flags 5l2kw
Hablamos de cómo ridiculizar las red flags y convertirlas en chorradas es una forma de luchar contra una poderosa herramienta de autodefensa feminista en redes. Las red flags son señales pequeñas de futuros problemas grandes. Sirven para eso y nos pueden salvar la vida a todas. Incluso en los casos menos graves quedarte con un red flag esperando que cambie, mejore o no la líe te impide tener tiempo para los green flags que hay por el mundo. Aunque solo sea por eso, no pases ni una! 5u2bw
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
Porque es Onda, otro podcast que nadie necesita menos nosotras.
Hola, soy Sheila.
Hola, yo soy Finia.
Y yo soy Beatriz.
Bueno, entonces, vamos a hablar de red flags que ya están pasadas de moda, pero venimos a explicaros que...
Estamos un poco vintage.
Como está todo volviendo a los 80, vamos a volver con lo que importa.
Primero vamos a empezar diciendo que una red flag es algo pequeño que te avisa de un futuro problema que va a ser grave.
Entonces, de entrada ya, cuando te dicen que vaya chorrada, es que red flags es justo eso.
Es algo pequeño que te avisa de algo grave.
Por eso se llama así, ¿vale? Se están riendo de las red flags y las están ridiculizando.
Y nosotras queríamos hablar de las red flags por esto, porque notábamos que ahí había algo, y era ¿por qué está pasando aquí? ¿Por qué se ríen tanto de las red flags y se las toman tan de coña? Y la semana pasada Divulvadoras sacaron el último episodio de su podcast, que ya sabéis que nos gusta mucho, y nos hizo ya todo clic, porque Maitena Monroy habló sobre autodefensa feminista y al escucharla hablar de autodefensa feminista, nos dimos cuenta de que las red flags son también una estrategia de autodefensa feminista.
Y como cualquier estrategia de autodefensa feminista, se intenta transformar en otra cosa que no sea ni autodefensa ni feminista...
Ni nada.
Que siga manteniendo el sistema, y por eso es esta ridiculización que vemos, de todo es una red flag...
Bueno, claro, pero porque nos sirven porque nos protegen, por eso es un ejercicio de autodefensa, porque nos protegen de, como decía Beatriz antes, ir hacia un peligro más chungo, ir hacia un lugar peor, ¿no? Entonces, claro que nos ridiculizan con...
Ahora, pues es que todo es una red flag, es que claro, es que no dejas pasar ni una.
Es que hay que ser perfectos desde el primer día, porque es una oportunidad, cuando dicen esto que me gusta mucho, es que claro, me estás haciendo pagar a mí todas las paranoias de tus ex, y yo lo único que estoy aquí tan tranquilo...
Vienes con mochila, ¿no? Me estás prejuzgando ya.
Pero ¿qué pasa? ¿Porque juzgo yo a la pleito los días desnudo con unos chetos a las tres de la mañana? ¿Que porque lo hacía un ex tuyo y ya vienen aquí a joderme? Y no te hagan ni puto caso.
Total, y luego otra cosa...
Y esto que decíamos, que claro que la red flag es una cosa pequeña, y que cuando tú no la ves, esas red flags siempre van incrementando su intensidad, por decirlo.
Pero llega un momento en el que lo que ocurre ya no es una red flag.
Esto también me parece importante, en plan, es que si de repente hay un ejercicio de violencia, eso ya no es una red flag, cariño, eso ya es un ejercicio de violencia.
Y si eso ha ocurrido, ese ejercicio de violencia, es que antes de ese ejercicio de violencia ha habido 213 red flags que tú te has comido o no las has querido ver.
Claro, porque es esa cosa que van increchando, como dices tú, como pasarte de nuevo ya lo dijimos alguna vez las pantallas del videojuego, y entonces el nivel es cada vez más difícil.
Totalmente, y esto se ve muy bien, hay una serie que me ha encantado y que de verdad, o sea, Nando López qué maravilla, o sea, me parece creo que es de las cosas más impecables que he visto últimamente.
Si nos has dado ganas de verla, porque no la habíamos visto ninguna.
Bueno, que como no la íbamos a ver para este capítulo, porque la serie se llama Red Flags, está basada en varios libros de Nando López y la ha escrito él.
Bueno, desde el punto de vista feminista interseccional, está muy impecable.
Una cosa impresionante.
Y hay un ejemplo, una de las chicas Luna, que está en una relación heteronormativa, o sea, heterosexual, con un tío que es el guapete del Insti, el molón, el Jorge Este.
Jorge Este es un pesado, es un controlador, es un pesado.
Y ella va viendo, ella ya hay cosas que le van chirriando, que esto, o sea, claramente son Red Flags, porque si te empiezan a chirriar, a ti se te queda el cuerpo y se te queda cara de gilipollas, de me parece a mí que me están metiendo un golazo.
Si a ti te parece que te están metiendo un golazo, cariño, te están metiendo un golazo.
Entonces hay un momento en el que ya, ella queda con unos nuevos amigos, que es de lo que va un poco la serie, y el novio va, porque ¿cómo no va a ir con unos amigos nuevos? ¿Estos quién coño son? Hay chicos además, pues ahí tengo que ir yo, que está si no, porque esta es una guarra, efectivamente.
Él está allí con una cara de seta, cariño, que parece que está en un velatorio. Otra Red Flag.
Otra súper Red Flag. Tú te lo estás pasando súper bien y él viene con la cara seta a joderte la noche.
Y está toda la noche de nos vamos ya y ella, pues me lo estoy pasando fenomenal, yo no me quiero ir. O sea, ahí hay tropecientas Red Flags, que ya las tendría que ver.
Bueno, ya hay un momento en el que ya por fin el otro, nos vamos ya y ella, bueno, venga, anda, que pesado, venga, vete, tal, se va con él.
¿Qué viene ahora? La violencia.
Y entonces ahí viene la bronca, ahora ya nos quedamos solos.
Te vas a enterar.
Es como, que no me has hecho ni puñetero caso en toda la noche, pero tú que te has creído.
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