🩺 MUFACE, AYUSO y el LOBBY FARMACÉUTICO 💊 MÓNICA GARCÍA | #noobstante 3x06 5w61n

Se ha generado cierta polémica alrededor de unas declaraciones que diste que igual no estaba entre tus prioridades, tocar Muface. ¿Crees que quizás esa declaración pudo dar alas a que las aseguradoras presionaran más? El Ministerio de Sanidad no tiene nada que decir en Muface, es Ministerio de Función Pública. Yo discrepo de lo que ha pasado con Muface. Estamos manteniendo de alguna manera un subsistema que es ineficiente y que yo creo que no le aporta nada ni a la salud de los funcionarios ni al Sistema Nacional de Salud.

¿Existió un distanciamiento entre Yolanda Díaz y tú en la fase previa a la conformación de la candidatura europea de Sumar? Tenemos que tocar el caso de Íñigo Errejón, todo lo que pasó alrededor de ese hilo que surgió en Twitter y demás, que pasó con Loreto Arenillas. Se ha hablado mucho de la presión que ejerce la industria farmacéutica. Se ha llegado a decir que Philip Morris ha llegado a hacer caer gobiernos por haber endurecido sus políticas anti-tabaco. La pandemia nos abrió una puerta a la sociabilidad. Hay una sociedad que está ahí fuera y para que yo esté sano y estén sanos mis padres o mis abuelos o mis hijos, tengo que tener un entorno que esté sano.

Los antisociales empeñaron mucho esfuerzo en cerrar esa ventana de la sociabilidad y dijeron no, no, no, qué demonios, aquí ¿qué es esto de que para salvarse el 1% se tenga que sacrificar el 99%? Como decía Ayuso, no, ¿qué es esto? Esto no, aquí cada uno que tenga libertad, que es básicamente libertad de ver cómo tus vecinos caen enfermos. El escándalo de las residencias de mayores en Madrid durante la fase más crítica de la pandemia. Desplegasteis esa famosa lona, pediste la dimisión del número 2 de Isabel Díaz Ayuso, Enrique Osorio, por cobrar el bono social térmico y más tarde se reveló que de hecho tu familia también lo estaba percibiendo. ¿Qué ocurrió? Pues mira, me alegro que aún me hagas esta pregunta. El gobierno finalmente ha cedido a las peticiones. ¿Hemos sido rehenes de un chantaje? ¿Lo has dicho tú? Si algo nos enseñó la pandemia del COVID-19 es que cuando se trata de salud entran en juego la política, la ideología y el poder.

Un poder que se disputa entre lo público y lo privado, entre el derecho a la salud y los intereses de los mercados, entre la vida y el negocio. ¿Por qué no se han depurado responsabilidades por el escándalo de las residencias en Madrid? ¿Por qué sigue la sanidad pública depauperándose y perdiendo terreno frente al sector privado? ¿Hasta qué punto las farmacéuticas, las aseguradoras y los lobbies influyen en las decisiones que toma el gobierno? ¿Qué es Muface y por qué ha causado tanto revuelo y controversia? ¿Es justo que sufraguemos con dinero público una atención médica privada reservada exclusivamente a los funcionarios del Estado? Hoy hablaremos de todo esto y mucho más con Mónica García, ministra de Sanidad.

Y sí, también abordaremos una de las grandes crisis internas de los últimos meses, los testimonios contra Éñigo y Rejón. ¿Qué se tendría que haber hecho de otra manera? ¿Qué autocrítica toca hacer y qué puede hacerse para prevenir que estas situaciones sigan dándose? Como siempre, antes de empezar hago un breve inciso para recordaros que no obstante es un podcast que estamos sacando adelante sin financiación o ayuda externa y sin obtener ningún tipo de remuneración. Si entráis en apoya.furor.tv a partir de solo un euro al mes podréis obtener beneficios como anticipado a todos los episodios, a estos episodios sin anuncios y la posibilidad de hacer preguntas a nuestros invitados y ayudarnos a que esto siga creciendo.

Sin más dilación, empezamos. No obstante, un podcast de Aime Roman para Furor TV.

Mónica García, muchísimas gracias. Antes que nada, muchas gracias por habernos hecho un hueco en tu agenda. Vamos a empezar, si te parece, haciendo un breve recorrido por tu trayectoria antes de tomar posesión como ministra. Luego ya hablaremos de algunos temas candentes y de actualidad y de coyuntura política.

Vamos a tener tiempo para tocarlo todo. Pero un poco para empezar. De hecho, para quien no tenga el dato, tú provienes de los movimientos de base, en particular de las mareas blancas, que han estado durante años, precisamente, protestando y movilizándose contra la privatización y contra los recortes en sanidad. Hoy eres ministra de Sanidad.

Dices, ostras, ¿cuánto queda de la activista en la ministra? ¿Surgen contradicciones? Bueno, de hecho, el Partido Popular me llama la ministra activista, como si fuera también una cosa un poco despectiva, como si el activismo en defensa de la sanidad pública fuera algo despectivo. Yo me siento muy orgullosa de haber defendido nuestro Sistema Nacional de Salud y nuestro Sistema Público de Salud desde el activismo y, por supuesto, ahora desde mi puesto de ministra.

Yo creo que no hay ninguna contradicción, hay una línea continua que me lleva a defender, a intentar reforzar el Sistema Nacional de Salud como una de las joyas que tenemos, como uno de los ejes que vertebran nuestra sociedad y como un estandarte de redistribución de la riqueza, de cohesión social, de símbolo colectivo, de salvavidas. Frente a todo este tsunami reaccionario, seguimos teniendo un Sistema Nacional de Salud que es envidiado en el resto del mundo.