
4.22.- Dos ejemplos de cómo seguir activo en el camino de nuestra vida. 4l22p
Descripción de 4.22.- Dos ejemplos de cómo seguir activo en el camino de nuestra vida. 2u3y2f
Hoy en “De Palique” con Doña Antonia Garrocho Martín, nacida el 30 de agosto de 1935 y con don Alejandro Martín Rodríguez, nacido el 26 de agosto de 1930; ambos estudiantes de los programas de formación sénior de la ULPGC desde hace años y dos verdaderos ejemplos de cómo seguir activo en el camino de nuestra vida y en este caso en el ámbito de la Universidad. Antonia y Alejandro nos acercan a una realidad que es evidente, como lo es permanecer activo en el aprendizaje y en la socialización a cualquier edad. 201e6h
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Hola, sean todos bienvenidos a este nuevo espacio de podcast en Radio VLPGC espacio Senior que denominamos De Palique. Les habla Domingo Santana y López por mamá, estudiante en la Diplomatura de Estudios Europeos II de la formación Senior de nuestra Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. El tema de hoy lo titulamos dos ejemplos de cómo seguir activos en el camino de nuestras vidas y en este caso en el ámbito de la universidad.
Nos encontramos en compañía de Antonio y Alejandro, a su vez estudiantes en la VLPGC, cada uno en distintas diplomaturas que nos van a acercar a una realidad que es evidente como lo es permanecer activos en el aprendizaje y en la socialización. En definitiva haciendo lo que más les agrada y al mismo tiempo los que más les gratifica. Para presentar a los invitados yo soy partidario de que se presenten ellos, sólo voy a decir dos cosas o una cosa pero en dos personas.
Doña Antonia Garrocho Martín nace el 30 de agosto de 1935, calculen ustedes los años que tienen y don Alejandro Martín Rodríguez nace el 26 de agosto de 1930, calculen también que para eso están ahí escuchando, para hacer matemáticas. Tengo su currículum, de cada uno lo tengo en mi poder pero creo que nos encantaría a todos que este encuentro más que una entrevista encorsetada fuera una tertulia de compañeros de universidad y de personas y así cada uno cuenta su propia experiencia.
Por lo tanto doy la voz para empezar con el respeto debido a la señora para que se presente y diga lo que quiera de momento. Adelante Antonia. Bueno yo soy Antonia, a mí me encanta lo que estoy haciendo, empecé en el 2004 y sigo todavía ahí porque no sé, lo paso muy bien y no quiero estar quieta y ya está. Empecé porque yo estaba estudiando inglés y tenía tan aburrida la profesora de inglés porque no daba una y un día la mujer tan amarga que estaba fue y me dijo oye ¿por qué no te apuntas en la universidad? Que hay unos cursos buenísimos y tú para eso sí vales.
Ah bueno, mire vete al Paraninfo allí y allí te apuntas, vete y fui y me apunté y la verdad que me hizo bienísimo y no he dejado de estar ahí. Empecé en el 2004 y todavía sigo. He hecho estudios canarios, estudio europeo, la pericia y doctrina y después me apunto a todos los seminarios y nada estudié cuando pequeña, estudié en el colegio de Nuestra Señora del Carmen allí en la calle 29 de abril y después hice el bachillerato y cuando terminé el bachillerato pues yo quería ser abogado pero mi padre decía pero esta niña es idiota. Que no, pues yo quiero ser abogado. Pues no, no, que maestra. Digo que yo no quiero ser maestra, que no y se me engrifó todo y me dijo que no, que no podía ser abogado.
Entonces pues me apunté a mecanografía, taquigrafía y hay contabilidad y después pues ya después no porque mi padre era de la Marina de Guerra, lo trasladaron a Tenerife, me fui a Tenerife. Allí trabajé unos años, dos años me parece, en el barco Bilbao. Después me vine para acá y ya está. Después me casé porque no tenía otra cosa que hacer. Tengo tres chiquillos y después en Terde, me parece que en el año 62 me fui a vivir a Terde.
Mi marido trabajaba con un ¿cómo se llama esto? un veterinario y después pero yo quería hacer algo, yo quería meterme pero claro me metí en un concurso de esos que había de bancos pero no, no me metieron, me dijeron que no, fuera. Entonces después él se enteró de que había una librería cerca del Correo Río María Osciladora que la estaban liquidando y dice ¿te gustaría la librería? Digo, ah pues sí mira, pues fui allí y ahí estuve 22 años.
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